Trabajadores sindicalizados y de confianza, despidieron a Zoila Virgina Rivero y Rivero y Guadalupe Hernández Rivero explanada de la Clínica 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social, la jefa de enfermeras dio unas palabras de consuelo a los familiares y recordó sus compañeras por la amistad que brindaron como el empeño en su labor.
Poco antes de la 1:00 de la tarde, los cuerpos de Lupita y Zoila fueron trasladados de Funerales Marsan para llevarlos a con su segunda familia en el Seguro Social. Personal del Sindicato 12 instalaron una ofrenda floral en la explanada y compañeras salieron de sus turnos para despedirse, algunas portaron globos blancos.
"Lupita atendía con gusto a los pacientes y amaba su profesión, ella fue parte de nuestra familia IMSS y estamos muy consternados y tristes. Acababa de recibir la noticia de ser enfermera especialista quirúrgica, quería meter este año la documentación y obtener su base como especialista, nos deja un gran vació en el aspecto personal y laboral, las vamos a recordar con mucho cariño", Margarita del Sagrario Peña Ramos, Jefa de Enfermeras.
Unos minutos después de la una, entraron dos carrozas al nosocomio y los choferes acomodaron el lugar para sacar los féretros. El esposo, el hermano y los hijos de Lupita eran abrazados por otras enfermeras y recibían palabas de consuelo de médicos.
Margarita del Sagrario Peña Ramos, Jefa de Enfermeras dijo a los presentes: “estamos con la familia y los acompañamos en estos momentos de dolor, no hay palabras para darles un poco consuelo, solo esperamos que Dios en su infinita misericordia los reconforte y a ellas les dé el eterno descanso”.
Recordó que Lupita fue una persona muy particular y alegre, con mucha energía y chispa, con una voz y personalidad fuerte que nadie podía evitar voltear a ver. Comentó, se quedan con el recuerdo de lo que ellas dieron y fueron, ambas trabajaron en el departamento de Enfermería y sus compañeras las recordarán todos los días, sobre todo Lupita que era muy jovial y mostraba menos edad de la que tenía.
“No tuve reportes de nada negativo de ella y siempre positivo, con eso nos quedaremos, un agradecimiento póstumo a Zoila por su trabajo y desempeño, como la amistad que nos brindaron. Las cosas no terminan aquí para los que tenemos fe, y tal vez no haya pacientes para dar agradecimiento, pero estoy segura que muchos de ellos lo harían de acuerdo a su carácter y como ellas fueron”
Compañeros sindicalizados, jefes y otros trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social abarrotaron los escalones de la entrada principal del Bloque A, guardaron un minuto de silencio y al finalizar, aplaudieron a sus compañeras en forma de despedida.
