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Coahuila

Encuentran a septuagenario extraviado

Por Admin - 19 octubre, 2016 - 03:43 a.m.

El neorrocitense, Julio Espinoza fue localizado por Manuel Salazar a la altura de la loma del Arco de bienvenida a Múzquiz

MELCHOR MÚZQUIZ, COAH.- Tras 48 horas de haber permanecido extraviado en el Ejido Palaú, finalmente el neorrocitense Julio Espinoza Garza de 70 años de edad, fue encontrado con bien en la cabecera municipal. A la búsqueda de este hombre que desapareció la noche del pasado lunes cuando realizaba la pisca de chile piquín, se unieron desde la tarde-noche del mismo día, personal de Protección Civil de Múzquiz y Nueva Rosita, Bomberos, Seguridad Pública Municipal y Policía Estatal Investigadora. Al no rendir frutos la búsqueda y localización se reanudaron estas acciones la mañana de ayer en el rancho Sabinas situado en el Municipio de Múzquiz, sin resultado. Fue a eso de las 13:00 horas cuando finalmente Manuel Salazar encontró al septuagenario; esta persona expresó a LA VOZ que labora en un negocio situado sobre la loma ubicada a un costado del Arco de Bienvenida a Múzquiz y es precisamente ahí donde la tarde de ayer observó a la persona de edad avanzada. ESTOY BIEN GRACIAS A DIOS Por su parte don Julio Espinoza agradeció principalmente a Dios por regresar con su familia, agradezco también a quienes iniciaron la búsqueda, a las autoridades policiacas, a todos, señaló, momentos antes de ser trasladado a una ambulancia donde le checarían la presión. Rasgado de su camisa, mencionó que andaba piscando chile cuando perdió de vista a las personas que lo acompañaban. En ese momento caminó y caminó sin lograr dar con su familia sintiéndose algo cansado, pero bien dentro de lo que cabe. Precisó que desde hace 3 años no realizaba esta labor, ahora la vegetación es mucha, todo está muy cambiado tal vez eso fue lo que me desoriento, expresó. Añadió que ha tenido la bendición de salir ileso en algunas tragedias como es el caso de la explosión de la mina Guadalupe aquel 31 de Marzo de 1969. Posteriormente resultó ileso un 25 de Enero de 1988 cuando en la Villa de las Esperanzas, Coahuila, explotó la Mina 4 y Medio, gracias a Dios, expresó, en esa ocasión, no me pasó nada. Finalmente comentó “Yo solo le pido a aquellas personas que acuden a realizar estas labores, que tengan mucho cuidado, pues son muchos los peligros que uno puede correr”.

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