La noche de brujas revive en el Fraccionamiento 288 los avistamientos de ‘criaturas extrañas’ como las aves enormes de ojos de fuego y el niño de cabeza amorfa, dos seres que afirman no son de este mundo y a más de uno le han metido un susto.
“Armando”, vecino del lugar, que por temor a ser juzgado “loco”, prefirió cuidar su identidad, relató lo que comenzó como una noche de convivencia entre amigos.
“Luego que mis amigos se fueron, me quedé sólo en el porche de mi casa, con la luz apagada, esperando acabarme el cigarro para irme a acostar y en eso escuché un ruido y al voltear a unas tapias enseguida de mi casa, vi claramente una figura negra”, explica.
Dice que incrédulo se acercó un poco más, pero al ver sus ojos de fuego, se paralizó.
“La sangre se me heló, ya no pude caminar, no me quedó de otra que orar y noté que entre más me asustaba, más crecía esa cosa. Le lance piedras a la ventana para llamar la atención de mi esposa, quería que me diera la Biblia” indicó.
Aseguró que su esposa le dio la Biblia, comenzó a leerla y tras varios minutos, logró que aquel ser maligno desapareciera.
Agregó que cierta ocasión tomó un taxi y le pidió que lo llevará a la colonia, el taxista le cuestionó sobre ¿Cómo estaban las cosas? “Yo pensaba que me preguntaba por la inseguridad pero no fue así”.
Entes malignos, avistamientos de enormes aves, es lo que se ve frecuentemente en calles del Fraccionamiento 288.
“Me dijo: “No, ¿No has visto al niño?, ahorita te voy a decir donde se aparece, ya varios lo hemos visto pero no es un niño normal, tiene la cabeza como extraterrestre, en óvalo” me quede frío pues noches antes mi esposa me había dicho que escuchaba como lloraba un bebé y cuando íbamos llegando a mi casa, me dijo: “de aquí sale”, justo a espaldas de mi vivienda.
Armando manifestó que otros de sus vecinos han confirmado el avistamiento de enormes aves que se paran a “vigilar” desde lo alto de los árboles que tienen en los patios de sus domicilios.
“Sabemos que por lo menos hay cinco brujas en la colonia, ya en la madrugada el ambiente se siente muy pesado”.
