Ante la ola de robos en negocios de la Zona Centro, comerciantes que han sido afectados desde meses atrás mencionan que de nada sirven las leyes, ni siquiera contar con tanto policía pues para ellos no hay duda que estén coludidos.
“Quienes tienen culpa son los que no vigilan, es el primer cuadro de la ciudad, no puede ser posible”, señaló una comerciante que sufrió un robo por más de 50 mil pesos en artículos electrónicos.
Fue el mismo modo de operación, un boquetazo, a raíz de eso ya no quisieron manejar articulo electrónicos, sólo por pedido.
“Ahí están cámaras, se entrega videos y nunca pasa nada, en videos se ve lo que hacen, lo que se llevan pero nadie hace nada, no sirven de nada las leyes y son los mismos que nos han robado a todos, ya se hallaron y si es pared abren eso no es impedimento”, comentó molesta.
Robo millonario en Salinas y Rocha.
Dijo que arriba de su negocio existía una puerta para el mantenimiento del techo, lo mismo pasaba con negocios vecinos, personal que arregló los aparatos de aire de la farmacia Benavides son los que estuvieron “midiendo terreno” para después operar.
“Ellos son los únicos, arreglaron aires de Benavides anduvieron arriba con grúas y sopletes, a mí me desoldaron la puerta, dejaron todo preparado y vinieron al día siguiente, eso fue hace como dos meses, se llevaron cerca de 50 mil pesos en aparatos electrónicos como celulares, tabletas, computadoras” comentó.
Tres meses después de ese robo, los ladrones volvieron a operar pero ahora en la Fundación Dondé, donde se llevaron decenas de celulares y otros artículos.
“Los ladrones operan tranquilos, muy a gusto, toda la noche, meten máquinas para soldar, desoldar y ¿Nadie ve nada?, todos están de acuerdo hay intereses de por medio, o sea nadie ve nada, nadie hace nada, es ilógico”, comentó.
La semana pasada se presentó el robo en “Joyería del centro” por más de 60 mil pesos en joyería, tampoco nadie vio nada y por último el robo de más de un millón de pesos en Banco Azteca dentro de la tienda Salinas y Rocha.
En pleno primer cuadro de la ciudad, el ladrón hizo un boquete en la pared para poder ingresar al negocio, no forzó la reja de seguridad y con equipo de corte logró abrir la caja para llevarse el dinero.
