Alegan también que la compañía no proveyó el mantenimiento adecuado a su helicóptero para evitar que se volcara, señala la cadena ABC.
Cardigan perdió la vida el domingo en un accidente del helicóptero que poco antes había partido de Nueva Jersey junto a Daniel Thompson, de 34 años, Brian McDaniels, de 26, Tristan Hill, de 29, y Carla Vallejos Blanco, de 29.
En estas giras, que se han hecho populares en ciudades como Miami, Los Angeles y San Francisco, las puertas del aparato se mantienen abiertas y los ocupantes amarrados con fuertes arnés a sus asientos, lo que se convirtió en una trampa mortal.
El piloto Richard Vance, de 33 años, fue el único sobreviviente del siniestro y logró liberarse mientras el aparato se hundía en las aguas, cerca de la isla de Roosevelt.
El helicóptero cayó al río Este. EFE
Los padres de Cardigan, que era de Texas, están representados por el abogado Gary Robb y reclaman que el piloto no instruyó a los pasajeros sobre la seguridad y que fue negligente al no tomar medidas para liberarlos después de haberlo logrado él mismo tras caer al río, agrega ABC.
Debido a que las puertas del aparato estaban abiertas para permitir tomar fotos, el helicóptero se llenó de agua rápidamente.
Estas puertas abiertas de los helicópteros son trampas mortales. Necesitas ser un artista de escape como Houdini si estás boca abajo y en agua fría, dijo a ABC el abogado, experto en litigios de accidentes de helicóptero.
Los Cardigan demandaron además a otras dos compañías, FlyNYON y NYONAir por presuntamente implementar políticas para amarrar a los pasajeros con resistentes arnés que están atados al suelo del helicóptero y solo un cuchillo para los pasajeros para liberarse de las aguas heladas.