La pesca furtiva que se ha registrado históricamente en la presa La Amistad y el equipamiento, son de los principales temas que se revisarán durante el 2020, con el fin de implementar acciones definitivas para reducir esta problemática, que afecta a la producción y captura de las cooperativas autorizadas en este sitio.
José Adelaido Palacios, presidente de la cooperativa dijo que al ser este un delito federal, se solicitará nuevamente que se asigne a inspectores que se encarguen exclusivamente de la vigilancia y se termine con la pesca de orilla que se hace sin permiso alguno con el que se pueda reforzar la vigilancia que actualmente está a cargo de los propios socios.
“No se tiene personal por parte de las dependencias oficiales, para realizar vigilancia en la presa para evitar la pesca furtiva, donde diario se observan lanchas con personas que aparentemente están practicando el deporte, pero están pescando sin permisos”, subrayó.
La pesca furtiva es una merma en los esfuerzos y ganancias de los pescadores.
Por lo que hace a la producción pesquera, indicó que la meta del año pasado fue de 50 toneladas, con el fin de ofrecer producto para el consumo local y el mercado del Norte de Coahuila.
Indicó que de acuerdo a la estadística de captura registrada solo durante la temporada invernal, que concluirá en dos meses, fue de cinco toneladas mensuales, de especies diversas como: besugo, carpa, lonja de cuchilla y bagre.
Respecto al equipamiento de los pescadores, el dirigente de la Sociedad Cooperativa La Amistad, José Adelaido Palacios, informó que cada año se analizan las condiciones de lanchas, motores y redes, así como accesorios, para desarrollar las actividades con más seguridad.
Jose Adelaido García Palacios, presidente de la sociedad cooperativa La Amistad.
