Las críticas que se vierten en redes sociales por líderes de ambulantes, que de hecho ni siquiera son ambulantes y se han dedicado a cobrarles por áreas que son del municipio, derivan que ahora ya no podrán seguir sacando dinero de esta actividad.
Roberto de los Santos, alcalde de Acuña, afirmó que se meterá orden al ambulantaje, lo que vendrá a ser positivo para los ambulantes, sobre todo para la mayoría de la ciudadanía.
La proliferación del ambulantaje al amparo de liderazgos espurios, en su mayoría de exconvictos y delincuentes, está al alza ante la falta de control de los diferentes órdenes de gobierno.
No es que se les prohíba la actividad, sino que deben regularse y evitar que se conviertan en la invasión de las vías públicas en todo el municipio.
De hecho, se busca reglamentar la actividad a fin de que eviten afectar a la mayoría de los ciudadanos, sin que se prohíba del todo la venta de sus productos.
El estado a través de regulación sanitaria deber controlar la venta de productos de segunda por el riesgo de salud que conlleva, pero no corromperse cobrando cuotas a quienes se dedican a esto.
El municipio ordena áreas y lugares para evitar que las calles se conviertan en embudos por donde no se puede circular en vehículos.
Las estructuras no deben quedarse en las calles, invadiendo la vía pública.
De hecho el alcalde ha girado instrucciones a los departamentos de Urbanismo, Obras Públicas, Ecología e Imagen Urbana para que realicen una reglamentación de la actividad que permita el desarrollo armónico de la ciudad, sin que se tenga que recurrir a la no autorización de la actividad.
Sobre todo se busca que los liderazgos espurios, que en su mayoría ni siquiera se dedican al ambulantaje, sigan comerciando con las calles, propiedad de los acuñenses.
