Vinculación a proceso con un período de investigación de seis meses y la medida cautelar de no acercarse a las víctimas obtuvo Fernando Ricardo (G) durante su audiencia de imputación por el delito de violación a la intimidad, acusado de la distribución de “packs” a través de internet, en la que las víctimas son mujeres de la región.
Las víctimas, Paola, Pilar, Vanesa, Victoria y Dania ha trascendido de manera extraoficial que son estudiantes de una universidad de prestigio y ellas acusan directamente a Fernando pues lo identificaron por la cuenta de Twiter a través de las que se distribuyeron las imágenes.
Durante dos horas y media se llevó a cabo la audiencia en la que se presentó de nuevo al juez, ya con el período ampliado la presentación de las pruebas que tiene el Ministerio Público en contra del estudiante de FIME Fernando Ricardo (G).
Ernesto Romero, abogado asesor de las víctimas.
El asesor de las víctimas, el abogado Ernesto Romero Guajardo dio a conocer los resultados de la audiencia, de acuerdo a su versión, no hubo presentación de testigos, ni tampoco testimonios de las víctimas, mientras que el imputado tampoco hizo uso de la voz.
Cabe destacar que también de manera extraoficial trascendió que el juez llamó la atención al imputado Fernando Ricardo, porque hizo expresiones de burla mientras él tenía el uso de la voz; cuando se le cuestionó esto al asesor de las víctimas dijo que efectivamente el Juez hizo una observación similar, pero que no supo si ésta era dirigida al imputado o a cualquier otra persona, porque él como asesor está de frente al juez y no tiene vista para los participantes en la audiencia.
Además, también se dieron a conocer datos en torno a que el mismo estudiante ya había hecho su declaración; durante la ocasión que fe detenido y luego puesto en libertad, él mismo regresó horas después a emitir su declaración por voluntad propia, así que una de las pruebas que tiene el Ministerio Público es la propia declaración de Fernando.
Y según dijo al Ministerio Público que él era muy inteligente y que conocía de sobra que al hacer su declaración confesando su delito, tendría una penalidad más ligera, y que las cosas saldrían a su favor.
