FRONTERA COAH-. Después de horas de incertidumbre y angustia, Candy Martínez, una adolescente de 12 años que había sido reportada como desaparecida la madrugada del jueves, ha sido localizada sana y salva. La noticia de su aparición ha traído alivio tanto a su familia como a la comunidad que, preocupada por su bienestar, había compartido su fotografía en redes sociales para facilitar su localización.
A pesar de que la joven se encuentra físicamente bien, persisten las incógnitas sobre los motivos que la llevaron a desaparecer durante varias horas y sobre dónde estuvo todo ese tiempo. La familia de Candy ha decidido no divulgar detalles sobre las circunstancias de su desaparición, limitándose a expresar su agradecimiento a las personas que colaboraron en la búsqueda.
La desaparición de Candy no es un caso aislado. En los últimos meses, se ha registrado un incremento en el número de adolescentes que deciden ausentarse voluntariamente de sus hogares, un fenómeno que genera una creciente alarma entre la población. Estas desapariciones temporales, aunque a menudo resultan en finales felices, revelan la existencia de problemáticas más profundas que afectan a los jóvenes, tales como la presión social, el acoso escolar, o problemas familiares que los orillan a tomar decisiones impulsivas y peligrosas.
Pese a lo anterior, es de vital importancia actuar de inmediato en estos casos. Cada minuto cuenta cuando se trata de localizar a un menor desaparecido, y la colaboración de la ciudadanía ha demostrado ser crucial. En el caso de Candy, la rápida difusión de su imagen y la pronta respuesta de la comunidad jugaron un papel esencial para su localización.