Castaños Coahuila.- Trabajadores informales, que “viven al día” han empezado a resentir la crisis principalmente por la falta de clientes, ahora por ser retirados de sus puntos de venta ante la contingencia del COVID-19.
Los comerciantes ambulantes han sido uno de los sectores que se vieron afectados tras las nuevas normativas del Estado donde ninguna persona debe estar fuera de su casa, por tal motivo el Alcalde Enrique Soto informó que buscará la manera de ayudarlos con un estímulo económico.
Señaló que los vendedores informales como taqueros, yuqueros, vendedores de verduras, han sido fuertemente perjudicados, pues inclusive el día que se les retiró por medidas estrictas de autoridades federales y estatales, algunos comerciantes le expresaron que un día antes habían surtido hasta 10 mil pesos para su negocio, que se les echaría a perder toda la mercancía.
Después de esto, el edil mencionó que está revisando la situación para ver como se les puede ayudar, de manera que no tengan que perder todo lo que invirtieron y evitar que se expongan y tengan ganancias de sus productos.
Destacó que muchos de los negocios ya establecidos han optado por dar el servicio a domicilio, o atender únicamente por ventanilla para evitar un mayor contacto entre compradores y vendedores.
