FRONTERA COAH-.En el marco del Día del Bombero, se llevó a cabo un simulacro de emergencia en el que se simuló un choque entre una camioneta y una pipa de gas en pleno centro de la ciudad. El ejercicio puso a prueba la capacidad de reacción y coordinación de las corporaciones de seguridad y rescate, quienes demostraron su preparación ante un posible desastre.
El incidente simulado ocurrió en una de las calles más concurridas de la Zona Centro, cuando el conductor de una camioneta no respetó el alto y se impactó contra una pipa de gas, generando una situación de alto riesgo tanto para los conductores involucrados como para los transeúntes cercanos. La respuesta fue inmediata: Protección Civil, Bomberos y diversas corporaciones de seguridad y rescate llegaron al lugar para controlar la situación.
Entre las instituciones participantes estuvieron la Policía Estatal, la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Seguridad Pública Municipal, Transporte y Vialidad, así como equipos de rescate de la Cruz Roja, Ecrem Samu y el Grupo de Rescate Urbano y Montaña (GRUM). También se contó con la colaboración de personal de Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), demostrando un esfuerzo conjunto y coordinado.
Ángelo Grimaldo, director de Protección Civil y Bomberos, lideró el simulacro y subrayó la importancia de estos ejercicios. "El objetivo principal es medir nuestra capacidad de respuesta, la coordinación con las diferentes corporaciones de los tres niveles de gobierno y los tiempos de atención de los grupos prehospitalarios", explicó Grimaldo.
El simulacro también incluyó evaluaciones sobre evacuación, tiempos de respuesta y el manejo de la emergencia. "Es fundamental asegurarnos de que la evacuación se realice en el tiempo establecido por la ley, de manera ordenada y organizada. Además, se evaluó si el ataque a la emergencia fue efectivo y si se brindó la atención adecuada a los ciudadanos", añadió el director. Cualquier deficiencia detectada se tomará como oportunidad para mejorar en futuros eventos.
Este tipo de simulacros, que exponen a los participantes a situaciones cercanas a la realidad, son esenciales para garantizar que, en caso de una emergencia real, las corporaciones y los ciudadanos estén preparados para actuar de manera rápida y efectiva.