FRONTERA COAH.- En la explanada de la presidencia municipal de Frontera, el personal de la biblioteca y del departamento de Educación creó un emotivo altar en memoria de Guadalupe Martínez Maltos, quien formó parte del cabildo actual como regidora y falleció en noviembre del año pasado. Este homenaje resalta su legado de lucha, coraje y su inquebrantable deseo de generar cambios positivos en la comunidad.
Ahí estuvo presente su hija Azenerh quien recordó a su madre con amor y respeto mencionando que siempre se sentirá orgullosa al decir que Lupita fue su madre.
Guadalupe fue recordada como una mujer comprometida con el bienestar de los ciudadanos, que nunca aceptó la conformidad ante situaciones injustas. Su incansable labor se centró en mejorar la calidad de vida de quienes más lo necesitaban.
"Me tocó acompañarla en la última etapa de su vida y siempre estuvo trabajando, aliada de colonias marginadas que requerían certeza jurídica, agua y drenaje. Era una gestora nata con mucha trascendencia en la ciudad de Frontera", comentó el alcalde Roberto Piña durante el evento.
El alcalde destacó la importancia de multiplicar las cualidades de las personas buenas, reflexionando sobre su relación con "Lupita" Maltos: "Siempre buscó la forma de que le fuera bien a la gente; si eso implicaba discutir, siempre lo hizo. No se dejó". Piña subrayó que nunca "chocaron" en sus visiones, siendo aliados hasta el último día de su vida.
Durante el evento, se explicó cada objeto del altar, que incluía pertenencias personales de Guadalupe Martínez Maltos, creando un espacio significativo para recordar su contribución a la comunidad. Este homenaje no solo celebra su vida, sino que también inspira a las futuras generaciones a seguir luchando por un Frontera mejor.