San Buenaventura, Coah.- Personal médico y administrativo de la clínica Rural número 51 hizo paro de labores el día de ayer por la falta de insumos de protección de contagio del COVID-19 señalaron que en este tipo de crisis, los tres niveles de gobierno deben cooperar y proteger a quien soportará la lucha contra este virus.
Fue alrededor de las 07:00 de la mañana cuando los trabajadores sindicalizados del IMSS que laboran en los tres turnos dentro del Hospital Rural #51 se reunieron para hacer valer su voz y sus temores de contagiarse del coronavirus que la noche del martes cobró la vida del médico Gualberto Reyes.
"No nos dan explicación alguna, estamos en ayunas y no tienen la decencia de hablarnos claro”, Gabriela Zapata, Derechohabiente.
La falta de Insumos como cubre bocas n95, guantes, bata, gafas de protección, careta, gel antibacterial y overoles impermeables, fueron el principal punto que tocaron los enfermeros, camilleros, doctores, limpieza y administrativo, así como también el personal de confianza, quienes desde temprana hora estuvieron en el lobby del hospital discutiendo sobre la seguridad del personal con el paciente, al no contar con lo necesario decidieron cerrar el acceso a la gente quienes estuvieron esperando por horas recibir la atención médica.
Los pacientes que estuvieron afuera argumentaron su molestia y la actitud del personal quienes no les daban explicación del por qué mantenían cerradas las puertas.
Cabe señalar que el doctor Federico Gómez Imperial director del Hospital se negó a dar declaración, pero mostró el apoyo al paro laboral, por otra parte Claudia Moncada, líder sindical optó por no proporcionar algún dato pero hizo presencia desde temprana hora, exigiendo a las autoridades la dotación de lo necesario para evitar el contagio de paciente a médico o viceversa.
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La institución médica está ubicada entre la capital del yuki y la ciudad de la Victoria por lo que el personal invitan a los alcaldes de ambos municipios Gladys Ayala y Abraham González Ruiz a dar el apoyo y dotar a todo el personal de insumos, un residente quien solicito omitir su nombre dijo que la clínica carecía de lo más mínimo como el cubre bocas y gel antibacterial.
“Ni siquiera gel antibaterial para las personas que entran y salen de la clínica, tuvimos dos casos sospechosos y solo se hizo su envió a Monclova al Hospital Amparo Pape, aquí no hay nada de seguridad para ningún paciente y menos si llegan con síntomas de COVID-19”, comentó el médico residente.
