La Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia (Pronnif) presentó ayer una denuncia formal por trata de personas en su modalidad de explotación infantil, en el caso de las dos menores de edad que fueron obligadas a trabajar y no se les permitía asistir a la escuela.
Las investigaciones revelaron que tanto los tíos como el padre de las niñas, de 10 y 9 años respectivamente, dieron positivo en las pruebas antidoping.
Ante estos resultados, Martha Herrera aseguró que los adultos involucrados no son aptos para mantener la custodia de las menores, quienes actualmente se encuentran bajo resguardo en un centro de asistencia social.
"Las niñas están recibiendo el apoyo necesario y se ha garantizado su seguridad, después de hacer las indagatorias vamos a presentar acción penal que consiste en presentar la denuncia formal en representación de las niñas por este delito", dijo la subprocuradora.
La subprocuradora destacó que el caso es alarmante y subraya la importancia de reforzar la protección de los menores en situaciones vulnerables. Así mismo, la dependencia está analizando a la familia de apoyo, realizando entrevistas psicológicas por si en algún momento se considera apta.
"No solo se trata de violencia familiar, sino de una grave violación a los derechos de las niñas, a la educación y al libre esparcimiento", puntualizó.
La presentación de la denuncia marca un paso importante en el proceso legal, y se espera que las instancias correspondientes actúen con prontitud para proteger a las menores y sancionar a los responsables.