Debido a una serie de circunstancias que existen en el entorno familiar de la abuela materna de Kimberly, no se le ha establecido como familia de apoyo, al no ser el mejor entorno para la joven.
El caso de Kimberly cuenta con antecedentes ante la PRONNIF desde el 2012, en donde se han presentado diferentes circunstancias desde omisiones de cuidado y supuestos abusos, a los que se les ha dado seguimiento.
Martha Herrera, Subprocuradora de la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, señaló que existen múltiples reincidencias con casos en 2012, 2018, 2019 y 2024, siendo el último reporte a finales de octubre de este año.
Las reincidencias que se han dado son de algún tipo de accidente, temas entre el padre y la madre de Kimberly, problemáticas entre la madre y la abuela, de donde se han obtenido los antecedentes de cada persona.
En cada uno de los casos, la dependencia ha realizado las acciones conducentes, aplicando el protocolo de seguimiento y realizando las investigaciones en el entorno de la menor para corroborar los hechos, sin embargo en ninguno de los casos se contemplo a la abuela como familia de apoyo.
Señaló que en el entorno de la abuela se ha confirmado que existe el consumo de alcohol, tabaco, además un ambiente con falta de limites y de autoridad, que no son propicios para la menor.
Así mismo se han realizado entrevistas a la familia, incluyendo a Kimberly y sus hermanos, que han caído en una serie de contradicciones en torno a los supuestos abusos que sufren en el hogar, por lo que se establece que es únicamente un acto de rebeldía de la joven, que no quiere estar en su casa y prefiere estar con su abuela.
Informó que tras la desaparición de la joven desde el pasado viernes, la PRONNIF colabora con la Fiscalía de Personas Desaparecidas proporcionando información y el expediente para contribuir con la búsqueda.
