Contactanos

Coahuila

Extorsionan a gasolineros inspectores de Profeco

Por Staff / La Voz - 24 mayo, 2017 - 03:50 a.m.

Ofrecen no inmovilizar bombas a cambio de una compensación e incluso los enlazan con personas que alteran bombas para surtir litros de menos

A través de “cuotas” a los gasolineros, los inspectores de la Procuraduría Federal del Consumidor mantienen una red de chantaje y corrupción en la región Centro de Coahuila.

Los funcionarios federales exigen cuotas que oscilan entre los 5 y 30 mil pesos a los propietarios de gasolinerías a cambio de hacerse “de la vista gorda” en las revisiones, o incluso tienen el descaro de ofrecer dispositivos para manipular las bombas y vender litros de menos.

Esta red de corrupción salió a relucir en los operativos de revisión que desde hace unos días están aplicando inspectores de la Profeco a gasolineras de la región Centro. La consigna es muy clara: pagan una cuota o por cualquier pretexto les van a inmovilizar las bombas despachadoras. La única forma de evitarlo es cediendo al chantaje con un pago en efectivo que varía dependiendo de la falta.

Los inspectores de Profeco que en teoría deberían vigilar la venta de litro por litro y proteger al consumidor, se han dedicado a llenarse los bolsillos de dinero bajo la amenaza que si los gasolineros no pagan una cuota, les van a inmovilizar las bombas de combustible ante la más mínima falta.

En días pasados los inspectores de la Profeco visitaron gasolineras de Castaños donde solo en un expendio recaudaron 30 mil pesos como “soborno” a cambio de no inmovilizar bombas que presentaban diversos detalles.

Al respecto el encargado del negocio reconoció, “Los inspectores de Profeco son unos extorsionadores profesionales. Tuve que aceptar pagarles para que no me clausuraran y evitar los trámites burocráticos que dejaría una gran pérdida de tiempo y dinero a mi negocio, en el colmo del descaro también ofrecen protección para que podamos vender litros incompletos”, manifestó.

El ofrecimiento llegó más lejos al dar un contacto que es proveedor de dispositivos electrónicos los cuales permiten manipular la venta de combustible y vender litros de menos, manifestó el empresario gasolinero que pidió anonimato por temor a más represalias.

“Nos ofrecen que vendamos litros de menos para que no nos “duela” la cuota fija y de esa manera siempre salir bien librados de las inspecciones que ordena la Profeco a nivel nacional”, indicó.

En Monclova ya fueron varias las estaciones de servicio que fueron extorsionadas por los sujetos, debido a esta denuncia anónima, personal de este medio se dio a la tarea de buscarlos y encontrarlos mientras inmovilizaban otra bomba en una gasolinera.

Al ser abordados, se negaron en todo momento a dar detalles de sus revisiones o responder por las quejas de abuso y extorsión que cometen contra gasolineros.

El representante de la Profeco que se identificó como Gerardo Mejía, con actitud nerviosa, abordó la camioneta y se marchó del lugar acompañado de otros tres inspectores.

En días pasados fueron más de seis las estaciones de servicio que se vieron afectadas por el hostigamiento, chantaje e intimidación de estos sujetos, que inmovilizan bombas de combustible bajo argumentos mínimos como no tener bien pegado un holograma o un letrero, sin dar la oportunidad de subsanarlo al momento y con un claro fin de buscar algún “arreglo”.

Cabe señalar que en el recorrido realizado se encontraron bombas inmovilizadas en diferentes sectores, pero ninguno de los casos fue por vender litros de menos.

Se tomaron fotografías de los engomados, con la inmovilización número 32 que de acuerdo a los causales de sanción, obedece a que la pistola no se bloquea después de 80 segundos de suspensión del abasto de combustible, falla que los despachadores indicaron puede resolverse en menos de 30 minutos con voluntad y un ajuste técnico.

Otra de las sanciones fue la número 63 por contar con un modelo de expendedor con opción de venta de diésel y a pesar de no tener manguera despachadora, no contar con el combustible.

Bajo estas nimiedades que no inciden en la venta de gasolina litro por litro, los inspectores de la Profeco presionan a los expendios de combustible, principalmente a los empresarios en pequeño para orillarlos al pago de jugosas prebendas.

HAY MÁS QUEJAS

Otro de los gasolineros consultados, puso al descubierto que existe una sociedad bien organizada que hace llegar los sobornos mensuales a los inspectores de la dependencia federal, a cambio de nunca ser molestados por los inspectores.

“Los operativos que se están realizando solo buscan presionar a los gasolineros que no estamos dentro de la cuota fija de sobornos”, advirtió la fuente.

“Buscan hasta la mínima falla para sancionar y cuando no la encuentran la provocan, para inmovilizar bombas”.

La actitud irresponsable y corrupta de los inspectores causó molestia entre los concesionarios.

“Lamentablemente todos callamos para evitar represalias de los inspectores de la dependencia, que ya nos tomaron la medida para mantener su ilegal forma de vida”, finalizó.

CÓMO OPERAN

1.-Acuden de manera sorpresiva a las gasolineras que no pagan la “cuota”.

2.-Encuentran cualquier excusa para inmovilizar la bomba, amparados en normas ambiguas y que no necesariamente refleja surtir litros de menos.

3.-Ofrecen no inmovilizar a cambio de una compensación.

4.-Enlazan a los gasolineros con personas desconocidas que alteran bombas para surtir litros de menos.

Artículos Relacionados