Debido a los casos de corrupción que se dieron en el Instituto Mexicano del Seguro Social, adultos mayores o personas con alguna discapacidad, se enfrentan a una serie de travas para tramitar su pensión, tardando incluso años para obtener esta prestación que por derecho les pertenece.
Médicos fueron parte de la corrupción, autorizando pensiones a personas que no contaban con un padecimiento, a cambio de cierta cantidad de dinero, lo que hizo que la federación pusieran especial atención en este tema.
En la actualidad los médicos familiares, especialistas y de medicina del trabajo, temen dar una incapacidad o iniciar un proceso de pensión, y llevarse una sanción o reclamo por parte de las autoridades, por lo que retrasan lo más que pueden el proceso, esto a pesar de que las personas cuenten con una lesión o incapacidad que les impida continuar desempeñando su trabajo.
El abogado Miguel Ángel Reyna Adam, señaló que son decenas, tal vez cientos de personas tan sólo en la localidad que se enfrentan a este problema, en donde los médicos los regresan a laborar a pesar de tener alguna lesión.
Las personas acuden a valoración, los revisan y a pesar de que los médicos sepan que tienen algunas limitantes y son candidatos para una pensión parcial, no lo autorizan, y los regresan a laborar.
También lee: Cae con droga
Mencionó que esto es debido a los antecedentes de corrupción del IMSS, donde los médicos pensionaron a muchas personas en años anteriores, que no tenían las enfermedades que se les ponía, por lo que con el cambio de Presidente de la República, se inició una investigación al respecto y a muchos se les canceló.
Señaló que lamentablemente no se procedió en contra de los médicos que incurrieron en esta falta, o al menos no se ha dado a conocer alguna sanción o separación del cargo, de quienes incurrieron en este fraude, pero sigue afectando a la población.
Comentó que actualmente los médicos tienen miedo de dar una pensión, por lo que se pone una serie de travas para retrasar el proceso, señalan que no cumplen con ciertos requisitos, que faltan documentos y los regresan a trabajar.
Mencionó que en su despacho han acudido un importante número de personas que tienen problemas para acceder a su pensión, por lo que se tiene que iniciar un proceso para que se revise su caso, el cual puede tardar varios años.
Existen comentarios de que se tiene prohibido a los médicos otorgar pensiones o que se les pone una marca negativa a quienes lo hagan, y se vuelve un proceso burocrático con el fin de retrasar el proceso.
TAMBIEN SE RETRASA LA CESANTÍA
Reyna Adam mencionó que el problema no es sólo en el caso de las pensiones parciales o por incapacidad, sino también en las de cesantía, en donde las personas que por derecho pueden acceder a una pensión al cumplir 60 años, también tienen dificultades para que se les otorgue.
En estos casos influyen muchos factores, en donde también se involucran las empresas que en muchas ocasionas niegan las cartas de baja de los trabajadores que cumplieron 60 años de edad, para que inicien los trámites ante el Seguro Social.
Señaló que muchos trabajadores que tienen 62, 65 años, son obligados a seguir laborando debido a que las empresas no otorgan su baja y no pueden tramitar su pensión en el Seguro Social.
Un caso de estos es Altos Hornos de México que alrededor de un 4 o 5 por ciento de sus trabajadores rebasan los 60 años de edad, sin embargo continúan laborando debido a que no se les otorga su baja.
Ante esta situación, el abogado comentó que se puede interponer demanda ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje para que se obligue a la empresa a que otorgue la baja, en caso de no hacerlo se puede tramitar un amparo para obligar a que la expida, o de lo contrario podrían ser multados o detenidos.
El litigante mencionó que existen muchos problemas en la región por las pensiones, en donde las personas no pueden acceder a su pensión, debido a las travas que se les ponen, tardando meses o años para que se les autorice y en ocasiones no se les da el monto que les corresponde.
En muchas ocasiones las personas no cuentan con un ingreso, por lo que se enfrentan a un difícil escenario y una lucha en contra de las instituciones, después de haber dado su vida en un trabajo y pagar sus impuestos, con el fin de asegurar un fondo para su retiro.
