“A mí me van a creer solo por ser mujer”, dijo presuntamente una estudiante de segundo grado de la Escuela Secundaria Juan Gil González al acusar a su compañero de clases de darle una cachetada y hacer una señal fálica, la cual previamente ella había hecho con anterioridad, provocando que el joven tenga que ser dado de baja del plantel debido al bullying que recibe luego de esta situación.
Gabriel González, Padre del estudiante mencionó que es injusto que solo a su hijo se le culpe de ambas acciones, aun cuando existen por lo menos cinco testigos de que la jovencita de segundo grado lo agredió primero, ya que ella primero se lleva y luego no aguanta.
Mi hijo es muy serio y nunca había tenido problemas de ese tipo, todo comenzó hace cinco meses cuando la niña llegó a la escuela y agredió a mi muchacho, pues ella le dio una bofetada y él se la devolvió, pero los maestros solo a él lo castigaron, dijo con molestia el padre del menor.
Mencionó que en esta ocasión, la estudiante tomó a su hijo de la nuca y le aventó la cabeza hacia abajo, haciendo alusión a una señal sexual, lo que su hijo replicó con ella y de nueva cuenta solo él recibió castigo.
“Considero que es muy injusto que la violencia de género solo victimice y beneficie a las mujeres, asegurando que en esta situación su hijo no es culpable y aun así se le está señalando, lo que consideró injusto pues el reglamento se debe aplicar igual para todos sin distinción de sexo.
Don Gabriel explicó que en varias ocasiones ha solicitado que el director de la secundaria cite a ambas partes y con los jóvenes presentes se investigue lo que realmente pasó, sin embargo el director no quiere carear a los dos estudiantes y mucho menos a los padres, quitándole al joven de tan solo 13 años la presunción de inocencia.
“Yo pido la intervención de la sub dirección de servicios educativos para que se investigue el caso como es debido, pues aquí hay dos partes involucradas y solo a uno se le está señalado, además los testigos que tiene mi hijo no son tomados en cuenta, dándole la razón a ella sin investigar”.
Es importante señalar que algunos docentes aseguran “meter las manos al fuego” por la menor y no así por el jovencito, asegurando que a la niña la conocen de la otra escuela en la que estaba y aun cuando el estudiante no es problemático, está siendo acusado y recibe bulling solo por ser varón.