“Que lo encierren hasta que se ahogue, que sufra, que lo pisoteen para que sienta lo que sintió mi hermana”, exigió Alyeni Alarcón Arancivia, hermana de Clorinda ”Coyita”, la migrante nicaragüense que murió en la caja del tráiler ‘invisible’.
Mientras esperan devastados los restos de su hermana, Alyeni pidió justicia a nombre de toda su familia y del pueblo nicaragüense.
“Nos duele profundamente en el alma la muerte tan cruel que encontró, solo un animal podría ordenar dejarlos abandonados dentro de una caja de tráiler”.
Sobre la detención de Ponciano “P”, el chofer del tráiler que los transportaba desde Los Reyes, San Salvador, Texcoco, en el Estado de México y de los dos cómplices que huyeron, pidió que los ‘encierren’ en el mismo contenedor donde venían los migrantes, que lo dejen ahogarse mientras muchas personas los pisotean.
Luego de conocerse la triste muerte de “Coyita”, Alyeni, señaló que han tenido contacto con el Instituto Nacional de Migración, que se ha ofrecido para el traslado del cuerpo de su hermana de regreso a su casa en el empalme “El hormiguero”, ubicado a 20 kilómetros de la ciudad de Siuna en Nicaragua.
“Iba a ser el viernes, pero al confirmarse la muerte del segundo nicaragüense, decidieron esperar y embarcarlos juntos hasta el miércoles de la próxima semana”.
Recordó que su hermana vendió su casa, y entregó los ahorros de toda su vida para reunir los 4 mil 200 dólares por persona que le pidió el “pollero” apodado como “El vaquero” originario de Guatemala.
“Viajaba mi hermana “Coyita”, su esposo Pedro Manzanares, su hermano Saturnino y la pequeña Briana de 3 años de edad. En total pagó 12 mil 600 dólares”.
Agregó que será muy difícil soportar la pérdida de su hermana y su angelito.
“Son unos malvados, injustos groseros, que les caiga todo el peso de la ley… de ser posible más”.
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