Monclova, Coahuila.– "Tenía al diablo metido en su casa", exclamó con dolor la madre de Daniela Maldonado, la joven de 32 años que fue asesinada a puñaladas por su pareja sentimental, Gilberto, la mañana del jueves, tras convivir con él durante 13 años en unión libre. En la funeraria La Paz, donde este viernes se realizaba el velorio, la madre rompió el silencio y compartió su testimonio con el periódico La Voz, visiblemente devastada.
"Mi hija nunca se quejó, nunca nos dijo si algo malo le pasaba... pero yo siempre supe, en mi corazón, que algo no estaba bien con ese muchacho", dijo entre lágrimas. Señaló que desde hacía tiempo notaba actitudes extrañas en el agresor, a quien describió como una persona con pensamientos oscuros. "Él tenía un Facebook donde se burlaba de Dios, hacía publicaciones ofensivas. Yo soy creyente, y sé que de Dios nadie se burla. El que lo hace, lo paga... y tristemente, mi hija terminó pagando también".
Daniela, madre de familia, solo había tenido a Gilberto como pareja desde la secundaria. Según su madre, jamás se relacionó con otro hombre y tampoco reveló jamás sufrir violencia. "Ella sabía que la amábamos, que siempre íbamos a apoyarla, pero nunca dijo nada. En parte, siento que participó en ese silencio, en esa oscuridad".
Sobre la hija que Daniela y Gilberto tuvieron en común, la madre de la víctima aseguró que hasta el momento no la ha visto. A pesar de la tragedia, mencionó que ya hablaron con los padres del agresor y que no existe rencor. "Esto no fue culpa de ellos. Yo siempre se lo dije a mi hija: ese muchacho no le traía nada bueno".