La investigación sobre la osamenta encontrada en el ejido Bucareli, comunidad de San Buenaventura, en Coahuila, ha llegado a un punto decisivo. Las autoridades han comenzado a tomar muestras de ADN a la familia de Yajaira Lizbeth Montelongo, una mujer desaparecida desde el 21 de julio, con el objetivo de determinar si la osamenta pertenece a ella.
El fiscal de personas desaparecidas, José Ángel Herrera, confirmó que la osamenta es de una mujer y que se han encontrado vestigios de un vestido gris y sandalias en el lugar. Sin embargo, aún no se ha confirmado la identidad de la víctima.
La toma de muestras a la familia de Montelongo es un paso importante para esclarecer el caso. Si las pruebas de ADN coinciden, se podrían resolver las incógnitas sobre el paradero de Yajaira.
Además, las autoridades han indicado que, dependiendo de los resultados de la investigación, podrían explorar la posibilidad de que se trate de un feminicidio, y se están preparando para seguir todas las líneas de investigación necesarias para esclarecer el caso.
Se espera que los resultados de las pruebas permitan avanzar en la investigación y brindar justicia a la víctima y su familia, poniendo fin a la incertidumbre y el sufrimiento que han padecido desde la desaparición de Yajaira.
