La Rosa señala que estos rastros de coronavirus en el agua de deshecho de las ciudades pueden servir como "espías" del estado de salud de sus habitantes y ayudar así a saber rápidamente si una población está siendo infectada por el patógeno y en qué medida.
Los expertos del ISS creen que este tipo de muestreo podrá ayudar a gestionar la conocida como "Fase 2", la reapertura gradual del país que el Gobierno planea impulsar a partir del próximo 4 de mayo.
El control de aguas no potables de los cascos urbanos permitirá trazar rápidamente y de forma indirecta la circulación del virus y detectar posibles repuntes y eventuales nuevos focos.
Se trata de una estrategia que ya se utiliza con otros virus, como el de la polio.
La conclusión de que estos hallazgos pueden servir de ayuda ha sido respaldada también por el presidente del ISS, Silvio Brusaferro, uno de los rostros visibles de la pandemia en Italia con sus frecuentes ruedas de prensa explicativas o balances.
"El resultado podría ser de ayuda en el control de la pandemia. Nuestros resultados se asemejan a los de otros grupos investigadores que han encontrado trazas del virus en el agua no potable, como en Países Bajos, Massachusetts (EU), Australia o Francia", sostuvo.
Desde que el ISS detectara el primer caso de contagio autóctono, el pasado 21 de febrero, Italia ha contabilizado 183 mil 957 infecciones por coronavirus, con las que han muerto 24 mil 648 personas, de acuerdo al último parte de la Protección Civil.