WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump aseguró que los recientes ataques estadounidenses contra tres instalaciones nucleares iraníes —Fordow, Natanz e Isfahán— fueron "completamente destruidos" durante la operación denominada Midnight Hammer, ocurrida el 22 de junio de 2025.
Trump afirmó que fue un "éxito militar espectacular" y que las tres instalaciones quedaron "obliteradas", respaldado por declaraciones de funcionarios del Pentágono en medios oficiales.
Sin embargo, análisis recientes revelan una realidad menos clara: según NBC News, solo la instalación de Fordow fue casi totalmente destruida, mientras que Natanz e Isfahán solo sufrieron daños menores que podrían permitir su reactivación en pocos meses. Un informe reciente del Pentágono estima que el programa nuclear iraní se retrasó entre uno y dos años, aunque persiste la incertidumbre si se trata de daños irreversibles.
El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, indicó que "nadie, incluido el OIEA", está en posición de evaluar por completo los daños subterráneos en Fordow, aunque reconoció que estos podrían ser "muy significativos".
Esta discrepancia entre lo dicho por Trump y las evaluaciones de inteligencia ha generado críticas de analistas, quienes advierten que exagerar los resultados podría incentivar a Irán a intensificar su esfuerzo nuclear y complicar la diplomacia en la región.