AUSTIN. Una jueza estatal emitió una orden que protege, por ahora, a las clínicas de Texas que efectúan abortos de las demandas de un grupo que se opone a la interrupción del embarazo derivadas de una nueva ley estatal.
La orden temporal de restricción -girada el viernes por la jueza estatal de distrito Maya Guerra Gamble en Austin en respuesta a la solicitud de la organización Planned Parenthood- no interfiere con la ley. Sin embargo, sí protege a las clínicas de demandas por parte del grupo sin fines de lucro Right to Life, su director legislativo y 100 individuos no identificados.
El 13 de septiembre se llevará a cabo una audiencia en torno a una solicitud para un interdicto preliminar. En una petición presentada el jueves por la noche, Planned Parenthood dijo que entre el 85% y el 90% de las mujeres que solicitan un aborto en Texas tienen al menos seis semanas de embarazo.
La orden “ofrece protección a los valientes trabajadores de salud y al personal de centros de salud de Planned Parenthood en todo Texas, que han seguido ofreciendo atención médica lo mejor que pueden dentro de la ley mientras enfrentan vigilancia, hostigamiento y amenazas de voluntarios armados ansiosos por detenerlos”, dijo Helene Krasnoff, portavoz de Planned Parenthood, en un comunicado.
Sin embargo, la orden no desalentará a Texas Right to Life, dijo Elizabeth Graham, vicepresidente del grupo.