Se revela que Tyler Robinson, el joven de 22 años detenido como presunto autor del asesinato del comentarista conservador Charlie Kirk, era visto por quienes lo conocían como “un buen estudiante”, según registros escolares y fuentes cercanas a su familia. Robinson, originario de Utah, obtuvo calificaciones destacadas en el examen ACT —una prueba de ingreso universitario en Estados Unidos— lo que le permitió ganar una beca presidencial para estudiar en la Universidad Estatal de Utah en 2021, aunque sólo asistió un semestre, de acuerdo con reportes de Reuters y agencias similares.En redes y en publicaciones antiguas de su madre se le describía también como un joven con amplias posibilidades académicas; en un video se le ve recibiendo la noticia de la beca mientras su familia celebra. Reuters+1
Aunque Robinson no tenía antecedentes penales ni afiliación política clara, su círculo más cercano refiere que en los últimos años había manifestado críticas hacia las posturas ideológicas de Kirk y que se había “político” su perfil. Investigadores también hallaron mensajes escritos en casquillos de bala con lemas anti-fascistas como “Hey, fascist!” y versos del himno “Bella Ciao”, así como conversaciones en plataformas como Discord donde Robinson describía detalles relacionados con el arma que presuntamente se utilizó.
El gobernador de Utah, Spencer Cox, aseguró que Robinson fue entregado a las autoridades tras que un familiar lo identificara en imágenes distribuidas públicamente, y después de que éste manifestara sospechas o confesara implicación en el incidente a ese familiar.
Robinson se encuentra detenido en la cárcel del condado correspondiente, enfrentando cargos de asesinato agravado, uso de arma de fuego y obstrucción de la justicia, entre otros. Se desconoce aún si se impondrá la pena de muerte, aunque las autoridades han señalado que ese es uno de los posibles castigos bajo las leyes de Utah.
El contraste entre su trayectoria escolar prometedora y las acusaciones actuales ha generado sorpresa entre quienes lo conocían. Documentos del colegio, publicaciones de excompañeros y fotos antiguas difundidas en redes muestran a un joven con buen rendimiento académico, participación en actividades escolares y ambiciones universitarias.
El caso, además de amplificar el debate sobre la violencia política en Estados Unidos, plantea interrogantes sobre cómo una persona con antecedentes tan distintos —alto rendimiento, sin antecedentes penales notorios— pudo verse envuelta en estos hechos, según la fiscalía y las declaraciones oficiales. Las autoridades aún no han confirmado un motivo definitivo, y el proceso judicial continúa en curso.