Marisa “N”, publirrelacionista y ex funcionaria saltillense, fue secuestrada y asesinada con la complicidad de su empleada doméstica.
Presuntamente, la trabajadora la puso en bandeja de plata para que sus captores lograran el rapto; de acuerdo con las autoridades, los secuestradores la citaron en una cabaña en Arteaga, pues le dijeron que querían rentarla.
La mujer fue interceptada por un comando cuando se encontraba al oriente de la ciudad: la trasladaron a Galeana donde la torturaron hasta quitarle la vida.
Primero, los criminales improvisaron una casa de seguridad al registrarse una falla mecánica en la camioneta, que los obligó a detenerse a la orilla de la carretera cerca del ejido Puerto México.
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Durante 2 días la víctima permaneció dentro del cuarto de adobe, donde era vigilada por los criminales y antes de pedir el rescate, le arrebataron la existencia.
Hasta el momento no se definió qué método utilizaron los secuestradores para privarla de la vida, pues la Fiscalía de NL continúa analizando el cuerpo de la víctima.
Gerardo Márquez Guevara, Fiscal General del Estado, dio a conocer que ya hay 3 delincuentes detenidos; el móvil del crimen fue económico porque robaron su camioneta y saquearon sus cuentas bancarias.