Los 43 alumnos de Ayotzinapa privados de su libertad, es una de las mayores tragedias de Derechos Humanos en México.
Ya se cumplieron 7 años con sólo 3 de los jóvenes identificados y además, el principal investigador del caso en el Gobierno anterior, Tomás Zerón, permanece prófugo en Israel.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador, ordenó hace casi 3 años reanudar las búsquedas, con lo que se identificaron restos de 2 nuevos estudiantes; también se investigó a los responsables de la Administración pasada, que dieron carpetazo al caso con un falso relato de hechos construido a partir de torturas a testigos.
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Sin embargo, el hartazgo comenzó a aflorar entre las familias, que dieron un voto de confianza a la Comisión de la Verdad creada por López Obrador, pues sienten que la Fiscalía General de la República y el Ejército, ponen muchas trabas al proceso.
Además, el séptimo aniversario llegó sin nuevos hallazgos y con la reciente muerte por COVID-19 de 2 padres de familia, quienes ya nunca sabrán el paradero de sus hijos.
Según la polémica versión del Gobierno de Enrique Peña Nieto, los 43 alumnos de la escuela para maestros de Ayotzinapa, fueron detenidos el 26 de septiembre de 2014 por policías corruptos en Iguala, Guerrero y entregados a un cártel que los asesinó e incineró.