La Fiscalía de Coahuila indaga si las dos armas que llevaba el menor de 11 años, quien disparó a su maestra y compañeros en el Colegio Cervantes en Torreón antes de suicidarse pertenecen a él, reveló el gobernador Miguel Ángel Riquelme.
En entrevista con Azucena Uresti, el mandatario estatal dijo que están esperando al abuelo del niño para tener su versión y aclarar el entorno del mismo, así como la procedencia de las armas.
“(El abuelo) estaba fuera y dentro de las indagatorias él es parte esencial de la procedencia de las armas. Probablemente el abuelo pueda ser el propietario de las armas”, señaló.
Al respecto el fiscal del estado, Gerardo Márquez, dijo que una de las principales líneas de investigación es que las armas se encontraban en el domicilio, pues “no hay forma de que por fuera puedan adquirirlas”.
Cuestionado sobre el calibre de las mismas, Márquez indicó que se está por determinar, pero preliminarmente se trata de un calibre 22 ó 25 y la otra 40.
Agregó que en caso de que las armas sean del abuelo no le pueden fincar cargos por la muerte de la maestra ni las heridas a otro profesor y cinco alumnos, pero sí por no haberlas resguardado adecuadamente.
El fiscal señaló que están por definir el perfil psicológico del menor, quien, mencionó, vivía con sus abuelos paternos ya que su mamá murió hace algunos años. Detalló que se ha entrevistado al padre, así como a compañeros del estudiante.
