Este pasado 26 de enero, se volvió a suscitar una marcha en la ciudad de Culiacán, esto en contra de la violencia en el estado, así como pedir la dimisión del gobernador del estado, Rubén Rocha Moya.
Por segunda ocasión en esta semana, miles de personas, todos vestidos de blanco, salieron a las calles de Culiacán para protestar por la muerte de Gael y Alexander Sarmiento, de 9 y 12 años de edad, quienes perdieron la vida tras un ataque armado por parte de criminales.
A la marcha asistieron familias, incluido menores de edad, con pancartas que pedían por la paz en la ciudad, así como la salida del gobernador del estado, el morenista Rubén Rocha Moya. Asimismo, también se incendió una piñata con la imagen de gobernador.
Ante esto, distintos puntos de las esferas políticas del estado, incluyendo universidades y simpatizantes de Morena, se manifestaron a favor del gobernador, asegurado que las marchas eran convocadas por opositores.