Luego de pasar casi dos décadas en prisión sin sentencia, Israel Vallarta Cisneros fue finalmente liberado el 1 de agosto tras ser absuelto de los cargos que lo señalaban como líder de la presunta banda de secuestradores "Los Zodiaco". En su primer encuentro con medios de comunicación, Vallarta dirigió un mensaje a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
"Quiero hacer un llamado con todo respeto a la presidenta Claudia Sheinbaum, que no permita este tipo de cosas. Yo sé que ella tiene la mejor intención, pero hay intereses más fuertes. Yo creo en ella", expresó Vallarta durante sus declaraciones, haciendo referencia al prolongado y cuestionado proceso legal que enfrentó.
Una liberación inesperada
Israel Vallarta relató que el 31 de julio, cuando fue notificado por el juzgado, pensó que se trataba de una diligencia más por parte de la Fiscalía General de la República (FGR), posiblemente relacionada con un amparo. Sin embargo, se sorprendió al enterarse de que había sido absuelto de todos los cargos.
Entre los delitos por los que fue absuelto se encuentran:
Privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro en perjuicio de diversas personas, incluidos menores de edad.
Delincuencia organizada.
Posesión y portación de armas y cartuchos de uso exclusivo del Ejército, Armada o Fuerza Aérea.
"Me quedé en blanco en cuanto a sentimientos. Ya había visto muchas cosas. Incluso pensé que me dirían que aún había otros casos pendientes, como el de Valeria, donde me identificaban en un auto gris en Tlalpan, pese a las contradicciones en el testimonio", compartió.
"No se creía libre"
El 1 de agosto, Vallarta pudo reunirse con su familia y dar sus primeras declaraciones públicas después de casi 20 años. Reconoció que, hasta el último momento, dudaba de que su liberación fuera real.
Su caso se volvió emblemático por las irregularidades en el proceso judicial y la falta de sentencia durante 19 años de encarcelamiento. Su mensaje a la presidenta Sheinbaum refleja una mezcla de esperanza y exigencia de justicia, apelando a su liderazgo para evitar que se repitan este tipo de situaciones.