El próximo lunes 2 de diciembre, los padres de Debanhi Escobar Bazaldúa se reunirán con la Fiscalía General de la República (FGR) en Ciudad de México para presentar nuevas evidencias y analizar el avance de la investigación en torno a la muerte de su hija, encontrada sin vida en abril de 2022 en Escobedo, Nuevo León.
Revisión de avances y nuevas líneas de investigación
Mario Escobar, padre de Debanhi, informó que la reunión con la FGR, programada a las 12:00 horas, tiene como objetivo revisar el progreso en la carpeta de investigación y aportar más pruebas. Estas evidencias se centran en reforzar la hipótesis de que la joven murió por asfixia, como han determinado estudios forenses independientes realizados por José Mario Nájera, médico guatemalteco, y el Instituto Nacional Forense (INSIFO). Esto contrasta con la versión inicial que apuntaba a una contusión en el cráneo como causa de muerte.
"Vamos a ver qué líneas de investigación nueva traen o cuáles son las que se siguen trabajando", comentó Escobar, destacando su intención de esclarecer el caso y avanzar hacia la tipificación del feminicidio.
Reunión con Rosa Icela Rodríguez
El martes 3 de diciembre, a las 17:00 horas, los padres de Debanhi se reunirán con Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, quien también ha ofrecido apoyo en el proceso de esclarecer el caso y lograr su correcta tipificación legal.
"Han aceptado algunas cosas del feminicidio, pero no lo han validado. Nosotros seguimos argumentando y metiendo evidencias para que esto se tipifique como muerte violenta y feminicidio, tal como lo confirmó el doctor guatemalteco de la ONU", señaló Mario Escobar.
Contexto del caso
Debanhi Escobar desapareció el 9 de abril de 2022 tras asistir a una fiesta en Escobedo, Nuevo León. Su cuerpo fue encontrado 12 días después en una cisterna abandonada en el Motel Nueva Castilla, cerca del lugar donde fue vista con vida por última vez. Inicialmente investigado por la Fiscalía de Nuevo León, el caso fue transferido a la FGR a petición de sus padres, quienes denunciaron irregularidades en la investigación local.
La familia Escobar Bazaldúa sigue exigiendo justicia, argumentando que las evidencias presentadas confirman que su hija fue víctima de un feminicidio, por lo que esperan que las autoridades federales den celeridad y claridad al caso.
