La Secretaría de Salud advirtió sobre el uso de arcos y túneles sanitizantes, al determinar que, hasta ahora, no existe ninguna evidencia de que sean eficaces para realizar una desinfección del Covid-19 y, al contrario, podrían aumentar el riesgo de dispersión.
En días recientes estos arcos o túneles sanitizantes han sido instalados en clínicas y hospitales de distintos estados del país como Zacatecas, Baja California y Coahuila.
En conferencia de prensa nocturna desde Palacio Nacional, Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, alertó sobre este riesgo de propagación del coronavirus de no usarse correctamente.
“Suponemos que hay una persona que tiene Covid y en sus vías respiratorias saca el virus. Lo que va a ocurrir es que conforme respira, esas partículas de virus se movilizarán y si el tiempo de sanitización no es el técnicamente recomendado y eso depende del volumen de de la persona, el área a cubrir, y también de la potencia de las sustancias sanitizantes. Puede ser que la persona pase muy poco tiempo y que no sea suficiente para inactivar al virus y tenemos el efecto opuesto: riesgo de propagación“, explicó el funcionario federal.
López-Gatell añadió que si dichos túneles satinizantes no fueran un riesgo “no habríamos dicho nada, solo habríamos dicho se está desperdiciando el dinero. Pero sí tienen un riesgo”, indicó.
Esta semana se instaló un túnel en la Unidad de Medicina Familiar número 23 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) del municipio de Sabinas, Coahuila, reportaron medios locales. Otro más se colocó la semana pasada en la entrada de la clínica 57 del IMSS en el municipio de Zacatecas.
En el municipio fronterizo de Mexicali, Baja California, se instaló un arco sanitizante, que rocía de químicos a las personas que cruzan el puerto internacional caminando desde Estados Unidos. También instalaron otro a la entrada del Hospital General; uno más en el aeropuerto y un cuarto túnel en el Palacio Municipal.
La alcaldesa, Marina del Pilar Ávila Olmedo, publicó un video en redes sociales en el que afirma que “estos dispositivos pueden eliminar hasta el 99 por ciento de los virus y tienen una duración de hasta 72 horas”.
Químicos pueden ser dañinos
Mediante un comunicado, la Secretaría indicó que la concentración del desinfectante podría ser insuficiente para inactivar al virus. Incluso, el aerosol generado facilitaría la diseminación del virus que pudiera estar presente en la ropa, cabello o pertenencias de las personas que pasan por el túnel, señaló.
Además, la inhalación de sustancias desinfectantes puede causar daños a las vías respiratorias, tos, estornudos e irritación de los bronquios, y desencadenar ataques de asma. También puede producir neumonitis química e irritación en piel, ojos y mucosas.
“Estas tecnologías podrían generar una falsa sensación de seguridad de las personas y descuidar medidas básicas de prevención como lavado frecuente de manos, uso de etiqueta respiratoria y mantener una sana distancia.
“En conclusión, la Secretaría de Salud no recomienda el uso y diseminación de estas tecnologías hasta que sea evaluada científicamente su efectividad, así como sus riesgos y beneficios”, subrayó.