VILLA DE SAN JUAN DE SABINAS, COAH.- ¡Maldigo el día que Mauro acudió a trabajar a Pasta de Conchos! Expresó Guadalupe Díaz viuda del minero que en algunos años fue elemento de Seguridad Pública Municipal.
“El siempre velaba por la seguridad de todo el pueblo en el Municipio de Múzquiz y mire, a falta de seguridad en una mina, él perdió la vida”, señaló el ama de casa.
“Sus hijos y yo no queríamos que viniera a trabajar a la mina, pero la obligación por sacar adelante a la familia lo obligó a ello, yo tenía un mal presentimiento y se cumplió, hoy estoy sin Mauro a quien cariñosamente la ciudadanía muzquense conocía como Pato”.
Dijo que Mauro la preparó psicológicamente una semana antes de la tragedia como si ya sabía lo que iba a pasar, él nos dijo muchas cosas, tal vez estaría muy bien con Dios que todo pasó, así como en su momento lo mencionó.
“Sufrí la pérdida de mi esposo, luego murió una de mis hijas y me quedé con dos más, un hombre que es el vivo retrato de mi amado esposo y otra hija y, a pesar de estar juntos como familia, sí se me carga la ausencia de mi compañero de vida”, abundó.
Guadalupe asegura que la fe no se ha quebrantado en estos 18 años y ya casi 5 meses, -todas las noches le pido a Dios que me lo regrese y nos de la fuerza para seguir adelante- además que los saquen a todos de Pasta de Conchos.
“Se que mi esposo está aquí con nosotros en espíritu, por ello le digo, te vamos a sacar de aquí y, a llevar con nosotros”, exclamó la viuda mientras mitigaba los calcinantes rayos del sol protegiéndose con un paraguas.
