“Estragos de una relación tóxica”.
El maltrato físico y psicológico crea dependencia emocional al grado qué la víctima se acostumbra a vivir ese estilo de vida”.
Cuando en una relación de amor existe el maltrato de cualquier índole, se crea un círculo tóxico qué hace pensar a la persona quién lo sufre, qué se lo merece pues su poca autoestima le hace ceder al daño qué le ocasiona la pareja.
La manipulación mental juega un papel importante en una relación tóxica, el verdugo sabe cómo controlar a su pareja, se vale de su necesidad de afecto para hacerle ver sus supuestos defectos para controlar su persona.
Cuando se carece de atención y amor bajo un sistema familiar disfuncional, dónde se presenta una ausencia parental de uno o ambos padres, las personas tienden a buscar parejas sustitutas qué les proveen de lo que carecen, sin embargo, encuentran personas que irónicamente carecen de lo mismo pero como tienen mucho poder mental patológico, terminan por controlar qué ser el o la víctima.
Cuantas parejas terminan y vuelven una y otra vez, aún, cuando hay violencia física, esto sucede porque se forma una codependencia tan fuerte qué ambos no pueden separarse aún cuando esté en riesgo la vida.
¿Qué factores negativos predominan en una relación tóxica?
El alcoholismo y las drogas.
Manipulación emocional.
Control mental hacía la persona.
Infidelidad conyugal aún cuando la víctima es consciente del engaño.
Chantaje con quitarle a los hijos.
Amenazas de todo tipo.
Prohibición de tener contacto social, así en cómo debe vestirse.
Castigos violentos si la víctima no cede a lo que quiere el victimario.
Las relaciones tóxicas ocasionan un daño tan severo en la mente, qué las personas aprueban hacer cosas irreales qué dañan su integridad y la de los hijos.
El sentimiento de pertenencia y aceptación son las causas principales para que una persona, permita qué sea maltratada.
La atención psicológica es importante para que el sujeto pida ayuda y salga de este círculo tóxico y destructor. Reconocer que está viviendo en un infierno y tiene que salvar su vida, es el primer paso para restaurar su autoestima.
Un verdugo deja de ser daño cuando se huye de él y se le pone un límite determinante, aún cuando use el chantaje y las amenazas para querer volver someter a su pareja.
Lic. Sergio Canizalez Ibarra psicólogo general, citas previas al WhatsApp 8662394782.
