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Opinión

“Me separé de ti, para valorarte más”

Sergio Canizalez Ibarra
Por Sergio Canizalez Ibarra - 15 junio, 2021 - 07:56 p.m.
“Me separé de ti, para valorarte más”

“Me separé de ti, para valorarte más”.

Una separación de pareja es un respiro para valorar, darte cuenta en qué debes mejorar y encontrarte contigo mismo.

Cuando una relación de pareja no puede continuar adelante, ya sea por desacuerdos o incompatibilidad de caracteres, es conveniente y necesario separarse por un tiempo indefinido. De esta forma, podrás reflexionar sobre si debes o no permanecer con tu cónyuge.

Una separación no es un divorcio ni una salida para andar como soltera (o) es la pauta para entender qué está pasando contigo y tú pareja, aquí pones una pausa para poner en orden tus ideas, pensamientos y sentimientos.

Los estragos que deja una mala relación, te hace perder la brújula de tu camino, olvidas que estar con alguien no es esclavizarte las 24 horas del día junto a los 365 días del año. Amar es compartir, sentirte amado, comprendo e importante para tu cónyuge, quien está a tu lado no es un objeto o una mascota qué le das una directriz y te obedece en todo. 

Tu pareja es tu compañero(a) en lo bueno y en lo malo, es quien te toma de su mano y atraviesan la odisea del matrimonio, ambos tienen que hacer equipo siendo simplemente, uno mismo.

Cuando te separas, porque ya la situación es desgastante, retomas tu vida, haces un paréntesis buscándote, recuperando quizá las alas rotas qué se destruyen cuando pierdes tu identidad por ser como tú pareja quiere que actúes, pienses o vistas. No estás obligado a estar con alguien por conveniencia, el verdadero amor se demuestra con respeto, fidelidad, confianza y comprensión. Todos estos aspectos debes de analizar cuando te separas, atiéndete psicológicamente si es necesario, enfócate en tu yo, para qué después decidas con madurez qué quieres realmente de tu vida.

 Una relación restaurada empieza por el recuperar tu amor propio y perdonarte a ti mismo, cada situación adversa trae un aprendizaje para ser mejor persona y por índole un cónyuge maduro y no egoísta. 

Si aún hay amor todo se puede salvar, pero es preciso, recibir apoyo psicológico para reforzar la convivencia, comunicación y la empatía del matrimonio. Una de las maneras de revivir una relación conyugal es volver al punto de partida donde empezó la historia de amor de ambos, ser novios.

El matrimonio no debe ser la catapulta para sepultar detalles, expresiones de amor, convivencia con tu esposa, etc. No caigan en la rutina de ser pero no hacer, el amor se alimenta y no se resta, sean un matrimonio dónde el noviazgo forme parte de sus vidas, más allá del trabajo, los hijos, problemas económicos, la costumbre ociosa, dense tiempo de pareja. Si la balanza de su unión marcha a flote, no hay diferencia que podrá más que el amor que se tienen.

No esperes a una separación para darte cuenta que tienes a tu lado, un compañero (a) de vida que es imperfecto pero que si salen adelante juntos, serán una pareja plena aún en las adversidades qué suelen pasar como matrimonio.

Lic. Sergio Canizales Ibarra, citas al WhatsApp 8662394782.

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