POR: ATILA
Y en Castaños se sufre la partida a un espacio mejor que este mundo inmundo de un gran personaje, Jacinto Contreras, exalcalde que en buena medida transformó esta localidad.
Querido por muchos y más por aquellos que desde siempre le siguieron a donde quiera que iba ya que no perdía oportunidad de hablar sobre los temas de actualidad y una que otra añoranza, hoy ya no lo hará más porque allá a donde va se encontrará con sus compañeros que le antecedieron en ocupar la silla de la oficina mayor de la presidencia municipal con quien se pondrá a platicar anécdotas.
No estamos nostálgicos o quien sabe pero el estado de ánimo es el resultado de lo que se vive alrededor.
Las notas de violaciones a niños no paran, se dan en todos los sectores, las madres están desesperadas y solo esperan que la justicia llegue temiendo que la paciencia se acabe y lo hagan por su propia mano.
Una plegaria a Dios por todos los que pasan por este trance, y una más pero con toda la fe del mundo para los funcionarios encargados de atorarle al asunto o los miles de asuntos como estos, que tengan la sabiduría necesaria para afrontarlo pero sobre todo resolverlos porque son unas papas calientes las que tienen en sus manos.
Y pasando a otra cosa les diremos que mucho ha dado de que hablar el mentado debate del domingo, nombre el asunto estuvo para dar risa.
Y lo decimos por muchas razones, entre ellas las exageradas promesas del Bronco a quien se le ocurrió la puntada de ofrecer 300 pesos como salario mínimo porque eso, según él es lo que merecen los mexicanos.
Nombre que no se equivoque el candidato independiente, los mexicanos merecemos más, mucho más para ponernos a la altura de los grandes países y tener el poder adquisitivo que los presidentes anteriores los quitaron.
Esa fue una puntada de las que dan risa junto con la de cortar manos, que si lo llegara a cumplir cosa que no se va a dar porque no va a ganar pues en la torre, que haríamos con tanto mocho.
Ya no seríamos el país de los moches sino de los mochos, si ya de por si en todo el mundo nos traen como canicas en lavamanos por aquello de las elecciones.
Al punto que las pronostican como el fraude del siglo por aquello de que el de Macuspana la llegara a ganar porque los de acá del norte dudamos mucho que se la den si es que la ganara cosa que está también muy difícil.
En fin que el mentado debate tuvo de todo menos seriedad comenzando por los moderadores que en momentos se vieron harto protagónicos y ni que decir de López Obrador que todo hizo hasta berrinches menos contestar y cuando abrió su oxidada boca solo fue para lanzar apodos a Anaya a quien le dijo Ricky, riquín, canallín, pues que es eso, no le da vergüenza conducirse de esa manera. Y así quiere ganarse el voto del pueblo.
No es por nada pero respuestas concisas las de José Antonio Meade y le sigue Anaya por aquello de que pierde demasiado tiempo en leer las estupideces de López Obrador que le sirven de mucho para exhibir al olvidadizo.
Dificil la tenemos los mexicanos y solo faltan 38 días para saber quien dirigirá los destinos del país.
Muchos hacen la recomendación de que no hay que dejar de lado a Dios en una decisión como esta porque de nuestro voto depende el futuro de nuestros hijos, por eso quienes saben y tienen fe en un ser que es Todopoderoso hay que tomarlo en cuenta.
Falta mucho por ver y oir, seamos prudentes.
Hasta Mañana.
