Piedras Negras, Coah. – Habitantes de la colonia Doña Irma alzaron la voz esta semana durante un recorrido vecinal, denunciando las deplorables condiciones en las que viven y la indiferencia del gobierno municipal encabezado por el alcalde Jacobo Rodríguez, quien —a casi siete meses de asumir el cargo— no ha visitado la zona ni atendido sus múltiples problemáticas.
El reclamo ciudadano es generalizado: calles destruidas, drenajes colapsados, basureros clandestinos y un riesgo sanitario latente. Las vialidades principales, como las calles Primera, Bravo, Tercera y Quinta, están plagadas de baches, grietas profundas y tramos intransitables, lo que ha ocasionado daños a vehículos y representa un peligro constante para peatones.
"Este sector se encuentra muy olvidado por el alcalde. No han venido a bachear, y la mayoría de las calles están feas", lamentó una vecina, molesta por la falta de atención.
Otro de los puntos más graves es el sistema de drenaje, que colapsa de forma recurrente, particularmente en la calle Bravo esquina con Tercera. De acuerdo con vecinos, el personal de SIMAS acude hasta dos veces por semana para destapar tuberías, sin resolver el problema estructural. El desborde de aguas negras, incluso dentro de los hogares, se ha convertido en parte de la rutina.
"Cada tercer o cuarto día tienen que venir a destapar. El agua se regresa por los escusados, y el olor es insoportable", relató otra residente, quien prefirió no dar su nombre por temor a represalias.
En la calle Sexta, a espaldas del Bordo de Defensa Norte, se ha formado un basurero clandestino con acumulación de escombro, llantas y desechos, que ya ha generado plagas y representa una amenaza para la salud pública. Aunado a ello, el zacatal ha invadido la zona sin que el Departamento de Ecología e Imagen Urbana haga presencia alguna, aumentando el riesgo de brotes de dengue y otras enfermedades transmitidas por mosquitos.
Las quejas en Doña Irma no son aisladas; son parte de un creciente hartazgo ciudadano frente a una administración que, según los vecinos, ha privilegiado la autopromoción por encima de las necesidades básicas de la población.
"No pedimos lujos, pedimos lo básico: calles transitables, drenaje funcional y un entorno limpio", expresó un residente al final del recorrido.
Los habitantes de la colonia exigen atención inmediata y una respuesta concreta por parte del gobierno municipal. El abandono, advierten, ya no es tolerable.