El futbol de Turquía está suspendido tras una decisión de la Federación de Fútbol de Turquía pues en el director del club MKE Ankaragücü golpearon en plena cancha al árbitro del partido por agregar tiempo extra al partido que terminó empatado.
“Este ataque se ha convertido en una noche de vergüenza para el fútbol turco. El fútbol turco no se merece esto, así que decimos basta”, denunció el presidente de la TFF, Mehmet Büyükeksi al anunciar su decisión: “Presidentes de clubes, directivos, entrenadores, jugadores y comentaristas de televisión que ponen a los árbitros en la diana son los perpetradores de este ataque”.
Los hechos ocurrieron en el encuentro del MKE Ankaragücü y el Çaykur Rizespor, el cual fue empatado en el minuto 97 por el equipo visitante. Después, fue el propio director del club local, Faruk Koca, quien saltó a la cancha junto con sus allegados y golpearon al árbitro central para después patearlo en la cara.
El árbitro fue enviado a un hospital de Ankara, capital de Turquía, donde este presenta una fractura en el hueso del pómulo y un derrame ocular, por lo que se mantendrá bajo observación y reposo.
Entre tanto, la Fiscalía se movilizó e inició una investigación. Seis personas, incluido Koca, fueron detenidos por la policía y llevados a declarar