MONCLOVA, COAH.– En un acto heroico y cargado de humanidad, elementos de la Policía Escolar salvaron la vida de un perrito que agonizaba dentro de las instalaciones de la Escuela Primaria Nuevo Almadén, ubicada en la colonia Ramos Arizpe, luego de quedar con el hocico atorado en un bote de plástico donde le habían dejado agua.
El dramático rescate ocurrió el pasado lunes, mientras los uniformados realizaban sus rondines de vigilancia en los planteles educativos durante el periodo vacacional.
Al llegar a la escuela situada sobre la calle 5, los oficiales llamaron al perro, quien funge como guardián del plantel, pero algo no estaba bien: el animal no respondía, ni ladraba, ni se acercaba como acostumbraba.
Alarmados por la inusual quietud del fiel animal, los oficiales se asomaron por la barda, solo para confirmar la desgarradora escena: el ´lomito´ tenía el hocico atorado en un pequeño bote de plástico, improvisado como bebedero, y luchaba por respirar. Su cuerpo yacía inmóvil, como si la vida se le escapara con cada segundo.
Sin dudarlo, los elementos de la Policía Escolar brincaron la barda de la escuela y corrieron hacia ella.
Uno de los oficiales tomó sus herramientas, cortó el bote y liberó el hocico del can, permitiéndole al fin tomar aire y recobrar la conciencia.
El ambiente pasó de la angustia al alivio. A pesar del terrible momento que acababa de vivir, la perrita no mostró agresividad alguna, al contrario: se dejó acariciar por sus rescatistas, en lo que parecía un gesto de agradecimiento silencioso y emotivo.
La rápida acción de los policías no solo evitó una tragedia, también dejó claro que el compromiso con la vida y el bienestar no distingue especie ni uniforme. Esta vez, el deber los llevó a salvar no a un ciudadano, sino a un alma de cuatro patas que solo cumplía con su tarea de cuidar una escuela vacía.
Las autoridades escolares fueron notificadas del suceso, y se comprometieron a mejorar las condiciones de cuidado del animal, para evitar que una situación tan peligrosa vuelva a repetirse.