Atodos nos ha pasado que llegamos a la cama con la esperanza de dormir un poco más de lo normal, pero el insomnio no nos lo permite. A partir de ese momento damos vueltas, revisamos nuestras redes sociales, tomamos un libro, entre otras.
Cuando nos sucede pensamos que es por el estrés. Aunque esto es cierto, hay otro factor que lo desata, tal es el caso de los
carbohidratos refinados que ingerimos a lo largo del día.
El consumo elevado de carbohidratos refinados, sobre todo los azúcares añadidos, aumenta el riesgo de insomnio en mujeres posmenopáusicas, informa un estudio efectuado por investigadores del
Colegio de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia, Estados Unidos.
Se ha demostrado que los
carbohidratos altamente refinados, como los azúcares añadidos, el pan
blanco, el arroz y los refrescos tienen un índice glucémico más elevado y causan un aumento rápido del azúcar en sangre.
En el trabajo, publicado en el The American Journal of Clinical Nutrition, los especialistas analizaron
a más de 50 mil mujeres que habían participado en una iniciativa sobre salud y habían realizado un diario con los
alimentos ingeridos.
La hipótesis de los investigadores fue que los
picos y mínimos de azúcar en la sangre después de comer carbohidratos refinados pudieran desencadenar el insomnio
.
Lo que descubrieron fue que cuanto mayor es el
índice glucémico en la dieta, especialmente cuando se consumen azúcares añadidos y granos procesados, mayor es el riesgo de desarrollar insomnio.
También comprobaron que las mujeres que consumían más verduras y frutas tenían
menosprobabilidades de padecerlo.
Las frutas contienen azúcar, pero la fibra en ellas disminuye la velocidad de absorción para ayudar a prevenir picos de azúcar en la sangre. Lo que sugiere que el componente de la dieta que provocó el insomnio de las mujeres fueron los alimentos altamente procesados que contienen grandes cantidades de azúcares añadidos, que no se encuentran naturalmente en los alimentos”.