South Park vuelve a estar en el centro del huracán mediático. El nuevo episodio de su tercera temporada titulado "Sermon of the Mount" (Sermón en la montaña) ha desatado una ola de reacciones por su dura sátira contra el expresidente Donald Trump, mezclando referencias políticas con escenas provocadoras que ya están generando controversia.
La serie, creada por Matt Stone y Trey Parker, ha sido conocida por sus críticas mordaces y sin censura. Pero esta vez podría haber cruzado una línea sensible, justo en un momento clave: los creadores firmaron un acuerdo con Paramount Global para producir 50 episodios en cinco años, valuado en 1,500 millones de dólares. Sin embargo, ese acuerdo podría verse afectado, ya que Paramount busca consolidarse con Skydance, fusión que aún necesita aprobación del Gobierno de EE.UU.
El episodio no escatima en imágenes que podrían incomodar a Trump. Entre las escenas más comentadas está una donde el expresidente aparece en la cama con Satanás, quien antes había sido amante de Saddam Hussein, y otra donde se le ve corriendo desnudo por el desierto con un micropene, representado mediante imágenes generadas por inteligencia artificial.
Más allá del impacto visual, el episodio hace referencias directas a las acciones legales de Trump, como su demanda contra el programa ´60 Minutos´ de CBS, por supuestamente manipular una entrevista clave para su candidatura de 2024, y la cancelación del ´Late Night Show´ de Stephen Colbert, dos eventos que la serie utiliza para señalar su lucha constante contra la crítica mediática.
Mientras algunos aplauden el atrevimiento del show por no ceder ante la autocensura, otros se preguntan si esto podría desencadenar represalias políticas o incluso afectar negociaciones empresariales en curso.
La polémica ya está servida, y en tiempos en los que la sátira política puede tener consecuencias reales, South Park se mantiene fiel a su estilo: irreverente, provocador y sin miedo a molestar al poder.
