VANGUARDIA.- Se dice que la última voluntad de una persona es sagrada, y este fue el caso de Adán Arana quien pidió a su hijo ser enterrado junto a la camioneta que este le regaló, y así fue. El hecho ocurrió en el municipio de Comondú, Baja California Sur en un panteón de Puerto San Carlos, donde el ataúd del hombre fue depositado en la camioneta, la cual fue enterrada con su dueño.
De acuerdo con medios nacionales, el hombre se dedicaba a la pesca y recientemente uno de sus hijos le obsequió una camioneta tipo pick up, que también quedó bajo la tierra tras la muerte de su dueño.
Tras sufrir problemas de salud, el hombre no pido disfrutar en vida del regalo de su hijo, así que decidió como última voluntad ser enterrado junto a la pick up.
Aunque parezca increíble, este no es el único hecho, pues un evento similar se registró en Estados Unidos, a principios de 2014, ese año Billy Standley se fue a la tumba con todo y su motocicleta, como estipuló en su última voluntad.
Standley fue embalsamado, cinco expertos prepararon su cuerpo y lo colocaron sobre la moto con ayuda de un aparato ortopédico y correas, después lo metieron a un ataúd de plexiglás, que fue enterrado en un cementerio de Ohio.
