Este domingo en una helada noche en Massachusetts, los New England Patriots derrotaron 13-9 a los Dallas Cowboys en un duelo marcado por la inoperancia ofensiva y a la vez eficiencia defensiva de ambos conjuntos.
Dallas tuvo el balón de regreso con poco más de dos minutos por jugar y parecía que el cuadro de Texas podría armar algo, pero una controvertida decisión de los oficiales terminó por derrumbar el sueño de los Cowboys de llevarse el triunfo de Foxborough.
Desde las primeras jugadas del partido supimos que el encuentro sería uno lleno de errores. En principio, los Cowboys movieron el balón, pero cuando llegó a la hora buena, Brett Maher estrelló en el poste un intento de gol de campo de 47 yardas.
Posteriormente, los Vaqueros cometieron una equivocación en equipos especiales y New England les bloqueó una patada de despeje y sacó puntos de ello.
Tom Brady encontró a N’Keal Harry con un envío anotador de 10 yardas y los ‘Pats’ pusieron el primer y único touchdown del encuentro. En la serie ofensiva siguiente, Dak Prescott fue interceptado y los Patriotas sacaron tres puntos del intercambio.
En el segundo periodo los Cowboys vivieron de la pierna de Maher. El pateador envió dos veces el balón por dentro de los postes para poner a Dallas en la pizarra; en cambio, Nick Folk, ‘kicker’ de los ‘Pats’, falló un intentó de 48 yardas para terminar la primera mitad.
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El viento, el aguanieve y en general las condiciones climáticas hicieron imposible que viéramos un juego lleno de touchdowns; de hecho, en la segunda mitad las únicas anotaciones fueron goles de campo, uno por equipo.
Primero, Falk incrementó la ventaja de los ‘Pats’ con una patada al inicio del último cuarto. Después, los Vaqueros estaban en zona de gol, pero en cuarta oportunidad y siete por avanzar, Jason Garrett decidió ir por un gol de campo en lugar de jugársela.
