Ella presentó un embarazo de alto riesgo porque desde los primeros meses, se le detectó placenta previa, lo cual hizo que tuviera varios ingresos al hospital que ameritaron hospitalización en Ginecología del Hospital General de Zona número 7 (HGZ) de Monclova, por sangrados.
Estuvo en la consulta de embarazo de alto riesgo, donde se le dio la indicación por escrito programada para cesárea, sin embargo, cuando llega a Urgencias de Ginecología del HGZ 7, omiten sus antecedentes y la dejan que tenga su bebé por parto natural, motivo por el cual mi hija hermosa, perdió la vida, tan joven.
La dejaron toda la noche sin atención, a pesar de que se le reventó la fuente desde las 9:30 de la noche del domingo 18 de febrero.
La Doctora Candy López, quien la atendió en la mañana, tomó una mala decisión, no se si por pereza o por maldad, que, con una simple cesárea, no tenía porque ocurrir lo que sucedió.
La misma Doctora, dos veces le tocó atenderla negándole incapacidad y mandándola a trabajar, las dos veces presentó nuevamente sangrado, por los cuales la volvieron a internar y lamentablemente fue esa doctora la que tomó la mala decisión de no practicarle una cesárea de inmediato.
Aparte, momentos después del parto natural, se activó estado de alerta, porque mi hija perdió demasiada sangre y también hubo otra mala toma de decisiones por parte de los responsables al no intervenirla de inmediato, sino hasta después de 12 horas cuando mi hija ya estaba en muy malas condiciones, y fallece.
Esto lo comparto para que llegue a oídos de los médicos que tienen en sus manos la vida de las personas y no haya más madres que pierdan a sus hijas, bebés y niños que se queden sin su madre.
Judith Ismelda Treviño Morales
