En plena temporada navideña, las familias de Monclova y la región enfrentan una dura realidad: los tamales, uno de los platillos más tradicionales y esperados para las cenas de Nochebuena, se han convertido en un lujo para muchos.
El precio de la hoja de tamal, elemento indispensable para su preparación, ha escalado de manera alarmante, alcanzando costos que oscilan entre los 200 y 310 pesos por paquete, dependiendo de la calidad y el tipo. Este incremento representa un golpe directo al bolsillo de los consumidores, quienes ya enfrentan el impacto de la inflación en otros insumos como la carne, la masa y los condimentos.
"Es una tradición familiar, pero este año hemos tenido que replantear nuestras opciones", comentó Silvia Martínez, vecina de la colonia Industrial. "Antes hacíamos hasta 10 docenas de tamales para compartir con toda la familia; ahora estamos pensando en reducir la cantidad porque simplemente no alcanza".
Además de la hoja de tamal, otros productos básicos para la preparación, como el chile seco y el pollo, también han registrado aumentos significativos. Este fenómeno ha llevado a que muchas familias consideren alternativas más económicas o incluso comprar tamales ya preparados, los cuales también han subido de precio.
A pesar de las dificultades, los tamales siguen siendo el alma de las reuniones navideñas en muchas mesas. Para algunos, la solución ha sido unirse en grupo y dividir los costos de los ingredientes. Otros, en cambio, optarán por recetas más sencillas para no perder el espíritu de la temporada.
La nostalgia por mantener viva la tradición y el esfuerzo por adaptarse a los tiempos difíciles son prueba de que, aunque el costo sea elevado, el sabor de los tamales y la calidez de la Navidad aún tienen un lugar en los hogares de Monclova.