"Fue algo muy fuerte que nos cambió a todos, a mis hermanos y a mi", externo entre lágrimas Ismael, hijo de Ricardo Apolonio Alarcón Rojas durante el juicio oral en el Centro de Justicia penal de Frontera.
Ayer miércoles se realizó el tercer día del juicio oral por el homicidio de Ricardo Apolonio "Polo" en contra de Arnulfo "N", bajo la causa penal 1356/2022, ayer se mandó a hablar a peritos forenses, a Gilberto "Ñoño" uno de los atacantes y al hijo de la víctima, Ismael.
Durante su declaración, el joven mantuvo un semblante serio y triste, relato cómo ocurrieron los hechos aquel 9 de octubre del 2022 en el Fraccionamiento Aguilar.
Dijo que su amiga le envió un mensaje por la madrugada para que acudiera a la fiesta, por lo que invitó a su amigo Orlando y Axel, al llegar al domicilio él va directamente con su amiga mientras que los demás se reúnen con los ya presentes. Después llegaron Kevin, Héctor y Uriel, este último le preguntó a Ismael que si tenía algún problema con Kevin.
"Yo le dije que no y me dijo 'que le llegara', fue cuando yo les dije a mis amigos que nos fuéramos. En la salida ellos nos siguen y me dicen 'Isma ven, ven', pero yo les dije que no, fue en ese momento que corrí a una dirección y mi amigo Axel al otro lado".
Fue casi a la altura de la frutería Jessica sobre la avenida Las Torres que Uriel logró alcanzarlo y Héctor le pegó en la cara por la espalda, provocando que se cayeran y procedieran a darle patadas, además Kevin la avienta y el casco de una motocicleta. Ismael se levantó y Uriel lo volvió a agarrar y a propinar patadas, al ver una camioneta cerca, Ismael pidió ayuda al chofer quien lo subió mientras que esos atacantes se fueron. En el recorrido se encontraron con su amigo Brandon y le dieron raid hasta la casa de Ismael, ahí le habló a su mamá para contarle y su papá lo escuchó en el altavoz, le dijo que lo llevaría al domicilio para saber por qué lo habían atacado.
Los papás de Ismael llegaron en 4 minutos y en el automóvil Aveo color azul, se dirigieron Apolonio, Ismael y Brandon hacia el domicilio de la calle Francisco Márquez. El automóvil quedó estacionado en la loma, del carro desciende Ismael quién se dirigió a la puerta, atrás de él iba Brandon y su papá se quedó a un costado de la cajuela.
"Yo hablé para que saliera Uriel pero por la música tuve que gritar para que me escucharan y poder hablar con él, la señora de la casa salió y del lado izquierdo salieron Calamaco, Uriel, Héctor, Kevin y Gilberto, quienes saltaron la barda. Mi papá me puso atrás de él para protegerme y fue cuando Calamaco se va en contra de Brandon y los demás nos rodearon, estaban a un metro de distancia".
En ese momento Ismael escuchó que su papá le dijo "corre al carro", yéndose él a la parte del copiloto mientras que todos los demás se pasan a la parte trasera del auto para romper el vidrio, Gilberto "Ñoño" le da cuchillazos a Ismael desde el exterior del auto, por lo que él procede a hacerse a un lado y usar las piernas para defenderse.
"Con la segunda patada lo golpeé en la cara, Gilberto se hace hacia atrás y voltea enfrente, yo volteo para ese lado y veo que Calamaco le tira con algo brilloso a mi papá, quién solo se trataba de cubrir con el brazo izquierdo. Yo volteo otra vez hacia Ñoño quién avienta el cuchillo adentro del carro y se hace para atrás".
En ese momento Apolonio acomodó el cambio del automóvil y al avanzar es que choca contra otro automóvil, acomoda la unidad y avanza hasta dar la vuelta a la cuadra.
"Papá y Orlando?", le preguntó Ismael, a lo que su papá le respondió "Tranquilo, tranquilo, porque me picaron", tratando de tranquilizarlo antes de desvanecerse. Ismael pone el freno de mano y sale del auto para cambiar de asiento, debido a lo pequeño del espacio es que recorrió el asiento del chofer para atrás, centro medio cuerpo sobre la pierna de su papá y con la puerta abierta manejó hasta su domicilio que se encontraba a siete cuadras.
Ya en la casa le habla a su mamá Perla, entramos trataron de ayudarlo pero su papá ya no respondía, en ese momento hablaron al resto de la familia y su abuelita fue quien se llevó a Apolonio al hospital donde corroboraron que ya no tenía signos vitales.
"Es un suceso que cambió todo y que fue muy fuerte para todos, para mis hermanos y para mí. No creo que alguien vaya a mentir para favorecer a Calamaco", dijo entre lágrimas Ismael, así como el resto de sus familiares que se encontraban en la sala 2 del Centro de Justicia Penal de Frontera.