A seis años de la tragedia de Dianita que murió desangrada tras 30 puñaladas que recibió de su novio “El Demonio” ocurrido el 21 de abril del 2016 en la Colonia Guerrero, la herida para su familia, especialmente para su mamá, la Señora Blanca Delia Estrada aún no sana.
Ayer la madre de Dianita acudió al cementerio a llevarle flores a su hija quien perdiera la vida cuando tenía solo 11 años, en manos de su novio quien en ese entonces solo tenía 13 años de edad, pero tenía la mala fama de ser un niño inquieto, que se drogaba y era muy violento.
Eran las cuatro de la tarde, hace seis años, y hasta el domicilio ubicado en la calle 39 con 4 en la casa marcada con el número 1017, llegó Javier Olaguer (de 13 años), alias “el demonio” quien había sido recientemente novio de Diana Lizeth (de 11 años).
Diana abrió la puerta y al ver a su ex novio Javier le pidió que se fuera, pero él hizo caso omiso e ingresó a la casa.
Según lo relató el propio Javier años después para una entrevista de un medio que circula a nivel nacional, él solo quería agua para beber, y no supo cómo es que llegó a esa casa, luego que se había tomado dos pastillas clonazepam unas horas antes, unos tragos de cerveza y un cigarro de marihuana.
Dianita acostumbraba a llegar a casa de la escuela, buscaba la comida que su madre o su hermana dejaban para ella, ese día su hermana Paloma le había preparado una sopa de lentejas que estaba en la estufa solo para calentar.
Diana estaba sola en casa, acostumbraba a llegar de la escuela comer y dormir la siesta, según sus familiares para las cuatro de la tarde (hora en que ocurrieron los hechos) ella ya habría despertado después de dormir un rato.
Cuando Diana abre la puerta y ve a Javier su primera reacción fue decirle “Vete con Nahomi” (la nueva novia de Javier), pero el chico dice que no la escuchó, para cuando se dio cuenta Diana había tomado un chuchillo de la cocina, e intentó atacarlo, pero él era más fuerte y en cuestión de segundos logró derribar a la chica en el suelo y se puso sobre ella.
Durante la discusión, entre dimes y diretes de ambos, Javier al ponerse enojado asestó la primera cuchillada en el cuello de la adolescente, ella comenzó a sangrar, pero no se conformó “El Demonio” con esa agresión, pues según la investigación del Ministerio Público, fueron 30 puñaladas en el cuello las que recibió la víctima, en cuestión de pocos minutos se desangró.
Vecinos del lugar, escucharon los gritos de la pelea y de auxilio que la chica pedía por lo que decidieron pedir apoyo a la policía, pero para esto, ya era muy tarde, Javier al ver la sangre y ver su ropa ensangrentada reaccionó y comenzó a correr, llegó hasta su casa y enterró la ropa que llevaba puesta, pues sabía que irían tras él.
Tiempo después cuando se dio la determinación del juez por los hechos, decidió que “El Demonio” pasara una condena de encierro en su propia casa, y que solo podía salir de ella para ir a la escuela, mientras que sería su madre su propia custodia.
Este veredicto, puso en la vista a propios y extraños que reclamaban a las autoridades esta situación; posteriormente el adolescente fue enviado al Centro de Salud Mental –CESAME- en Parras, donde solo duró unos meses y después volvió a Monclova.
A lo largo de estos seis años “El Demonio” ha sido exhibido constantemente en notas del orden policíaco, donde se demuestra su historial delictivo, pero ya hoy en día Javier Olaguer es mayor de edad.
Mientras la familia de Dianita sigue sufriendo su pérdida, sobre todo su madre que señala “no entiendo por qué yo tuve que despedirte a ti, porque tengo que vivir sin ti, si por ley de la vida debería ser al revés”.
