El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, señaló que aunque el aumento del 12 por ciento al salario mínimo para 2025 es positivo para los trabajadores, esto representará importantes sacrificios para los empresarios a fin de mantener los precios competitivos y conservar empleos.
Tras el anuncio del aumento del 12 por ciento que entrará en vigor a partir del 01 de enero, Humberto Prado señaló que están contentos de que los trabajadores reciban un mejor salario con estos ajustes.
Sin embargo mencionó que como empresarios, tendrán que hacer algunos sacrificios con el fin de absorber este impacto económico, al menos por un tiempo, hasta que se normalice la situación.
Indicó que este incremento implica costos adicionales para los patrones, como son mayores contribuciones al Seguro Social, al Infonavit y otros impuestos empresariales, además del alza en los precios de insumos y servicios.
"Este aumento genera un efecto en cascada. Por ejemplo, si un cliente está acostumbrado a pagar 10 pesos por un producto y ahora le dices que serán 12, regatean. Esto nos deja rezagados porque no podemos trasladar completamente el incremento a los precios, lo que nos obliga a asumir el costo", explicó.
Prado Montemayor destacó que este ajuste responde a compromisos internacionales, como los establecidos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, pero lamentó que no se considere el impacto en las pequeñas y medianas empresas, especialmente en el contexto de crisis económica.