BARROTERÁN, COAH.- El dolor y la tristeza invadieron el pequeño municipio de Barroterán el domingo, cuando familiares, amigos y compañeros de estudios se reunieron para dar el último pase de lista a Ximena Guadalupe Cardona Reyes, una joven de 20 años que perdió la vida trágicamente tras ser arrollada por un vehículo descontrolado. El accidente ocurrió en la calle Zaragoza en Sabinas, cuando el conductor, que viajaba a exceso de velocidad, trató de esquivar a otro automóvil y terminó embistiendo a Ximena. El delegado de la Fiscalía General en la Región Carbonífera, Ulises Ramírez Guillén, confirmó que el responsable del accidente será judicializado, "Esa es la prioridad", señaló.
El fatal incidente tuvo lugar cuando Ximena se dirigía hacia la parada del autobús después de terminar sus clases en el Centro de Estudios Universitarios de Coahuila (CEUC).
Su compañera de estudios, Dora Irasema, relató el impacto emocional de la tragedia: "Ella salió delante de mí, y me siento terriblemente mal porque llevábamos el mismo rumbo. Si hubiera sabido que ella iba para allá, la hubiera llevado en mi carro. Pasé por el lugar del accidente apenas cinco minutos después".
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Ximena Cardona fue velada en Funerales García, en Barroterán, donde el dolor y la conmoción fueron palpables. La sala de velación se llenó de amigos, familiares y compañeros de clase que acudieron para ofrecer sus respetos y compartir el duelo con la familia. El ambiente solemne reflejó el profundo lamento por la pérdida de una vida joven y prometedora.
La misa de cuerpo presente se celebró en la Parroquia San Juan de los Lagos, con una congregación que mostró su apoyo a la familia de Ximena. Durante la ceremonia, se compartieron anécdotas y recuerdos sobre la joven, destacando su carácter amable y su dedicación a sus estudios y a su comunidad. La presencia de sus compañeros de clase y su maestra en la misa subrayó el impacto positivo que Ximena dejó en su entorno académico y social.
El momento culminante de la despedida se llevó a cabo en el panteón municipal de Barroterán, donde se realizó el último pase de lista. La maestra de Ximena, acompañada por sus 26 compañeros de clase, pronunció el nombre de la joven en un acto lleno de emoción y respeto. Las lágrimas se mezclaron con el silencio mientras la comunidad rendía homenaje a una vida truncada a tan temprana edad.
El trágico accidente de Ximena ha puesto en relieve un problema persistente en la región: la falta de seguridad vial. La velocidad excesiva de algunos conductores. Esto ha llevado a un llamado urgente por parte de la comunidad para que se implementen medidas de control más estrictas para prevenir futuros accidentes.
Mientras la comunidad de Barroterán se enfrenta al duelo por la pérdida de Ximena, se espera que las autoridades actúen con rapidez para garantizar que el responsable del accidente enfrente las consecuencias legales correspondientes. La memoria de Ximena Cardona, una joven que dejó una marca indeleble en su comunidad, permanecerá viva en el corazón de aquellos que la conocieron y amaron.
