SALTILLO, COAHUILA.– La Diócesis de Saltillo señaló que no existe el divorcio en la Iglesia Católica, y rechaza expresiones como "divorcio católico" o "divorcio religioso", que han circulado recientemente en algunos medios de comunicación y redes sociales.
"La figura del divorcio no existe en la Iglesia" resaltó la Diócesis, y exhorta a la ciudadanía a no dejarse llevar por titulares inexactos que pueden inducir a confusión sobre los procedimientos eclesiásticos.
La Iglesia Católica, en lugar de divorcio, contempla la nulidad matrimonial, un proceso mediante el cual se declara que un matrimonio nunca fue válido desde su origen, por existir impedimentos o vicios al momento de su celebración.
Esto puede deberse a causas como falta de consentimiento válido, impedimentos como el parentesco, o errores en la forma litúrgica del matrimonio.
"A diferencia del divorcio civil, la nulidad no implica la disolución de un vínculo válido, sino que constata que nunca existió tal vínculo desde el principio", subraya el comunicado.
Este procedimiento es llevado a cabo por el Tribunal Eclesiástico a través de un juicio formal en el que se analiza si se cumplen las condiciones requeridas. Cualquiera de los cónyuges puede solicitar la nulidad, incluso sin el consentimiento del otro, siempre que existan motivos válidos y justificados.
La Diócesis hizo énfasis en que la indisolubilidad del matrimonio sacramental es una enseñanza fundamental de la Iglesia, por lo que no existe ni se reconoce un proceso equiparable al divorcio dentro del Derecho Canónico.
En resumen, la nulidad matrimonial canónica no es un divorcio, sino una figura legal específica del ámbito religioso que, tras un análisis minucioso, concluye que un matrimonio nunca tuvo validez ante Dios y la Iglesia.
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![Desmiente iglesia ´divorcio católico´]( "Desmiente iglesia ´divorcio católico´")
El Tribunal Eclesiástico puede declarar la nulidad matrimonial cuando se comprueban causas legítimas desde el momento de la boda.
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La nulidad implica que, pese a una ceremonia, el vínculo matrimonial nunca fue válido; no debe confundirse con el divorcio civil.
